PRIMER RELATO ENVIADO.

Descripción de la experiencia:

De repente el coche volcó y yo me quité el cinturón de seguridad. Yo estaba tratando de salir. Pero el coche volcó y fui lanzada contra el techo del coche. Mi cuello se quebró. El dolor era insoportable. No podía respirar. Me encontraba en alguna parte. Estaba oscuro. Yo estaba flotando, a la deriva, existía en un espacio desierto, brumoso, inmenso. No había nada en su interior, nada salvo yo.

De repente, me sentí ansiosa. Y entonces me acordé de mi amigo, un amigo, alguien que necesitaba desesperadamente de mí. No podía dejar de pensar en mi amigo. De repente, me aterroricé. ¡Se me necesitaba! ¡Estaba desesperada! ¡Tenía que hacer algo! Estaba llena de una energía y de una potencia mucho mayor de la que nunca antes había sentido, algo me dio el poder en este vasto y vago espacio para salir de él. Tiraron de mí hacia atrás, hacia el sitio donde se me necesitaba. Era una fuerza más grande que la gravedad, estaba movida por mi emoción, mi preocupación, mi terror. Estaba tan preocupada por mi amigo. ¿Qué estaba sucediendo?

No podía dejar de preocuparme por mi amigo. Estaba aterrorizada. Estaba llena de miedo, sabía que se me necesitaba. Tenía que volver.

¿Alguna medicación asociada o sustancias que pudieran afectar la experiencia? No.

¿La experiencia fue difícil de expresar con palabras? No.

¿En el momento de la experiencia, había allí algún acontecimiento que amenazara su vida? No.

¿Cuál era su nivel de consciencia y de vigilancia durante la experiencia? Completamente despierta.

¿Experimentó una separación entre su consciencia y su cuerpo? Sí.

Cuando llegué de vuelta a mi cuerpo, tuve que traerme de vuelta a la vida. Tuve que hacerme respirar de nuevo. Y tuve que reparar mi cuello que resultó herido.

¿Oyó usted algún sonido extraño o ruidos? Me hablé a mí misma. Traté de llamar en voz alta, pero me di cuenta de que no salía ningún sonido. Lo intenté de nuevo y de repente pude hablar.

¿Pasó usted en o por un túnel o recinto? No.

¿Vio usted una luz? No.

¿Encontró usted o vio a algún otro ser? No.

¿Experimentó usted una revisión de acontecimientos pasados de su vida? No.

¿Observó usted u oyó durante su experiencia algo relacionado con personas o acontecimientos que pudiera ser verificado más tarde? No.

¿Vio usted o visitó dimensiones, niveles o lugares hermosos o de alguna otra manera peculiares? No.

¿Tuvo alguna sensación de alteración del tiempo o el espacio? Sin respuesta.

¿Tuvo usted la sensación de tener acceso a una sabiduría especial, a un orden y / o propósito universal? Sí.

Después de volver he sido capaz de sanar y llevar las cosas de vuelta a la vida.

¿Alcanzó usted un límite o una estructura física de delimitación? No.

¿Tuvo usted consciencia de acontecimientos futuros? No.

¿Se implicó en, o fue consciente de, una decisión de vuelta al cuerpo? Sí.

Estaba tan preocupada por mi amigo que me precipité hacia mi cuerpo bajando por una cuerda de luz. Entré en mi cuerpo viendo que estaba atrapada bajo toneladas de peso, estaba asfixiada, incapaz de moverme. Me obligué a respirar. Luego me puse a examinar mi cuerpo. Empecé por los pies, pasando por las piernas para llegar finalmente al cuello. Mi cuello estaba mal herido.

Pero mi preocupación era por mi amigo. Traté desesperadamente de llamarlo por su nombre. Nada. Lo intenté de nuevo, y poco a poco pude escuchar algunos sonidos. Finalmente pude llamar, grité su nombre. Me desperté. Pero allí no había nadie. Me sentí sola.

¿Cómo resultado de su experiencia, ha recibido usted dones psíquicos, paranormales u otros dones especiales que no tuviera antes de la misma? Sí.

Puedo sanar y curar.

¿Tuvo usted tras su experiencia algún cambio de actitudes o creencias? Sí.

Ya no temo a la muerte.

¿Ha afectado la experiencia a sus relaciones? ¿Vida diaria? ¿Prácticas religiosas etc.? ¿Opciones de carrera? Sí.

Cambié de carrera y de punto de vista después de la ECM. No juzgo a las personas.

¿Ha cambiado su vida expresamente como consecuencia de su experiencia? Sí.

¿Ha compartido usted esta experiencia con otros? Sí.

Sólo le hablé de esta ECM a mi amigo. Él tuvo una ECM positiva. Cuando lo conocí, supe que había tenido una ECM antes de que me lo dijera.

¿Qué emociones experimentó usted después de su experiencia? Terror, desesperación.

¿Cuál fue la mejor y la peor parte de su experiencia? No había mejor o peor parte… Se trataba solamente de salvar, de ayudar, de volver hacia mi amigo.

¿Tras su experiencia, tuvo usted algún otro acontecimiento en su vida, medicamentos o sustancias que reprodujeran alguna parte de la experiencia? No.

¿Las preguntas planteadas y la información que acaba usted de proporcionar describen exacta y exhaustivamente su experiencia? Por mi experiencia, las ECMs negativas no son fáciles de comunicar. Es una lástima, pues se puede aprender de ellas cosas buenas tanto como de las ECMs positivas.

SEGUNDO RELATO ENVIADO.

Descripción de la experiencia:

De repente me encontré a mí misma sola. En un triste, gris, inmensamente grande, espacio brumoso, yo estaba sola. Sentí un abrumador miedo creciendo dentro de mí. Me sentí asquerosa, echada a perder, agobiada por la vergüenza. ¿Por qué no había hecho más cuando tuve la oportunidad? La oportunidad de cambiar las cosas para mejor, ahora se había acabado y yo la había perdido. La sensación de remordimiento era abrumadora.

Un conocimiento me llenó: “Aquí, en este horrible espacio vacío, no hay posibilidad de cambio”. Me sentí tan arrepentida, había perdido mi oportunidad.

(Nota: los detalles que acabo de mencionar se me olvidó incluirlos en el primer relato que les envié. Sin embargo, creo que son importantes. También es interesante observar que en aquella época yo era todavía bastante joven, no había hecho nada “malo”. Yo era enfermera y cuidaba de personas. Aun así, tuve una ECM negativa).

Entonces, pensé en algo, de nuevo estaba llena de miedo: “¡Mi amigo! ¿Cómo estaba? ¡Tenía que volver a él!”.

Una larga cuerda de plata, pegada a mí, tiró de mí hacia abajo a una inmensa velocidad, todo lo que pude pensar durante el descenso fue en mi amigo. Aterrada, quería volver a él, sentía que me necesitaba. Estaba tan desesperada, sentía que tenía que llegar. Las emociones que fluían a través de mí me hicieron darme cuenta que seguía siendo yo misma, que incluso en este espacio seguía siendo la persona que siempre fui.

(Como mencioné en el primer relato que les envié, volví al interior de mi cuerpo bajo una gran presión como si toneladas de arena estuvieran asfixiándome. Estaba abrumada por el enorme peso que llevaba sobre mí. Pero luché contra la presión y me obligué a mí misma a respirar en contra de la presión.

Me traje a mí misma de vuelta a la vida, haciéndome respirar a mí misma de nuevo y curando mi cuello. El pánico por alcanzar a mi amigo, que sentía que me necesitaba, era tan grande que me dio el poder de curarme a mí misma para volver a él.

Para más información…ver el primer relato que les envié…).

(Nota: esto también es de interés: tras pasar por mi ECM, mis ideas sobre la reencarnación cambiaron, sabía que era verdad, sentía que era algo muy normal).

Y aunque mi experiencia fue negativa, perdí mi miedo a la muerte. Obtuve el conocimiento de que uno puede curarse a sí mismo. También adquirí la capacidad de curar a los demás.

Mi hija estaba llorando. Había encontrado a su pez de colores muerto en el suelo. Había estado allí tirado durante tanto tiempo que había empezado a secarse. Lo recogí, lo puse en la pecera, lo moví lentamente de arriba abajo y volvió de nuevo a la vida. ¡Esto ha sucedido tantas veces con otros peces que mi marido e hija piensan ahora que es normal que los peces, al igual que los gatos, tengan todos nueve vidas! También me he dado cuenta de que puedo ser capaz de ayudar a la gente a curarse, pero no estoy muy segura de esto.

Estaba aterrorizada por su seguridad. No paraba de preguntarme cómo estaba él.

¿Alguna medicación asociada o sustancias que pudieran afectar la experiencia? No.

¿La experiencia fue difícil de expresar con palabras? No.

¿En el momento de la experiencia, había allí algún acontecimiento que amenazara su vida? Incertidumbre.

Fue un accidente de coche. Tanto yo como mi compañero estábamos en peligro. El coche se salió de una carretera rural, voló en el aire sobre un acantilado, quedando volteado sobre su techo, golpeando el suelo y estrellándose contra un árbol. El coche quedó destrozado.

Nos salvamos sólo porque el coche que conducíamos era un viejo modelo Volvo, 1964, con una barra estabilizadora de acero o de hierro que retuvo el impacto del accidente.

En la desesperación, me quité el cinturón de seguridad en un movimiento reflejo por salir del coche. El coche volando por el aire, giró repentinamente cuando chocó contra el suelo, yo fui lanzada con toda la fuerza contra el techo.

Caí con todo mi peso sobre mi nuca. Sentí una repentina, dolorosa rotura. El dolor en mi cuello era tan extremo que se disparó a través de mi cabeza como una ráfaga de pura energía.