Descripción de la experiencia:

Cuando tenía 8 años, mis padres me llevaron a mi, a mi hermano de 7 años y a mi hermana de cinco años a dar un paseo. Llevamos un almuerzo de picnic. No podíamos encontrar un lugar para comer, así que mi padre aparcó en un estacionamiento en una zona mayormente residencial. El estacionamiento estaba dividido en dos por unos árboles. Comimos nuestro almuerzo en el auto, luego los niños salimos a estirar las piernas y a jugar. Mis padres se quedaron en el auto hablando. Corrimos más allá de los árboles y fuera de la vista del coche. Vimos un gran montón de grava y pensamos que sería muy divertido subir y jugar en ella. Empezamos a correr hacia ella.

Cuando estaba corriendo, una extraña sensación me invadió y me detuve. No sé qué era, pero sentí como si debiera detenerme y quedarme donde estaba. Mi hermano y hermana se adelantaron. Estaba muy confundida por esta extraña sensación. Mientras estaba ahí, me di cuenta de los “Seres” a mi alrededor. Aunque no podía verlos, podía sentirlos allí. Creo que eran tres. Ellos me “dijeron” telepáticamente, no vayas al montón de grava. Me dijeron que me quedara donde estaba. Esto fue muy extraño para mí ya que no tenía ni idea de lo que estaba pasando. Mi hermano y hermana fueron ahora al montón de grava, riendo y jugando. Me llamaron para que me uniera a ellos. No había razón para no ir con ellos.

Rechacé las voces telepáticas y di algunos pasos. Fue entonces cuando me topé con algo que solo puedo describir como un muro invisible, o un campo de fuerza. Honestamente no puedo describirlo. Solo sé que no podía moverme más allá. Estaba muy confundida y un poco asustada porque no entendía. Los seres no me asustaban. No tenía ni idea de qué o quiénes eran, pero sabía que eran benévolos.

Me estaba sintiendo ansiosa porque no entendía qué pasaba o qué pasaría. Empecé a dar vueltas dentro de la pequeña “caja”, dando solo dos o tres pasos en cualquier dirección. Mi hermano y hermana me llamaron de nuevo, realmente, realmente quería ir a jugar con ellos. Se estaban divirtiendo mucho. ¿Qué podría decirles acerca de por qué no me unía a ellos? Esos Seres invisibles me habían puesto en una caja invisible de la que no podía salir. Pensarían que soy rara. Así que, simplemente les dije que ya no quería jugar en el montículo de grava. Fingía estar interesada en las piedras del suelo. Me agachaba y recogía una y la examinaba, así parecía más convincente. Todo el tiempo estuve escuchando las risas y los gritos de mi hermano y hermana divirtiéndose en el montón de grava, deseando estar allí.

Con el paso del tiempo, me puse más y más ansiosa. Tenía una creciente sensación de que algo iba a pasar. Los Seres aún estaban a mi alrededor, rodeándome. Podía sentirlos allí. Luego, en un instante, y de repente, me di cuenta de que un perro cercano había estado ladrando todo el tiempo. SABÍA que ese perro iba a lastimar a mi hermano y a mi hermana. Fue como un repentino destello de conocimiento y el instante en que tuve este conocimiento la pared que me había encerrado desapareció y comencé a correr hacia el montón de grava y gritar a mi hermano y hermana, “¡Corran, Corran! ¡El perro los va a atacar!” Justo cuando empecé a correr hacia mis hermanos, el perro que había estado atado en un jardín cercano, se liberó y corrió hacia mi hermano y hermana. Ellos empezaron a correr pero el perro saltó sobre mi hermana, la tumbó al suelo y la mordió en la espalda. Mi hermano tuvo que golpear al perro con su puño. Corrimos el uno hacia el otro, luego comenzamos a correr hacia el auto de nuestros padres. Mi padre nos escuchó gritar y salió y golpeó al perro.

Tuvimos que llevar a mi hermana a la sala de emergencia. Necesitó algunos puntos pero estaba bien. Yo, por otro lado, tardé casi 60 años en recuperarme de esa experiencia. No le conté a nadie lo que había experimentado. No quería que pensaran que era rara. Pero al ser una niña un tanto espiritual, inmediatamente empecé a cuestionarlo. ¿Por qué me salvé de ser lastimada, pero mi hermana no? Yo era una revoltosa. Ella era la niña más dulce en todo el mundo. Yo era la hermana mayor. Debería haber sido yo, no ella quien fuera lastimada. Tenía la culpa del sobreviviente.

No podía reconciliar esto con el Dios que creía conocer. No fue como si esto hubiera sido un evento aleatorio en el que el perro simplemente decidió morder a un niño y no al otro. Dios en realidad hizo todo lo posible por interferir en los eventos terrenales para salvar a un niño y no a otro. O esta experiencia no sucedió, o Dios no era el Dios que creía conocer. Decidí ir con la primera opción. Analicé esta experiencia desde todos los ángulos posibles. Hablé con terapeutas y leí libros de psicología. Quería creer que no había sucedido como lo recordaba; que o bien el trauma del evento me hizo no recordarlo correctamente, o mi culpa de sobreviviente me hizo “reescribir” el recuerdo para hacerlo más aceptable, o tuve algún tipo de colapso mental. Pero ninguno de estos cuadraba porque mi hermano y mi hermana recordaban el evento exactamente como yo.

No se me ocurría ninguna razón por la que no me hubiera subido a esa grava con ellos. Entonces, el problema debe ser Dios. Hice un viaje de toda la vida para comprender la teología detrás de Dios, el bien y el mal, el libre albedrío, etc. Leí, estudié. Incluso fui al seminario. Hablé con teólogos, directores espirituales y sacerdotes. Ninguna respuesta me satisfizo. Finalmente, hace unos días, encontré este sitio web y comencé a leer sobre las ECM. La gente describía cómo habían “muerto” y resucitado porque “no era su momento”, y me di cuenta de que Dios no me había salvado de que me lastimaran, me había salvado de que me mataran. Fui salvada de la muerte. Mi hermana sufrió una mordedura de perro, que requirió algunos puntos. No tuvo ningún trauma duradero. ¡Ni siquiera le tiene miedo a los perros! Pero creo que si hubiera sido yo, de alguna manera habría muerto y no era mi momento. Fue así de simple. Me tomó casi 60 años entender esto, pero se trata del viaje y aprendí mucho en el camino. Gracias por proporcionar a las personas un lugar para compartir sus experiencias.

Información previa:

Sexo: Mujer

Fecha en que ocurrió la ECM: 1968

¿En el momento de su experiencia, existía alguna circunstancia que amenazara su vida? Si Esta es “Otra” experiencia provocada por una amenaza de daño corporal o muerte. No es una experiencia fuera del cuerpo o ECM. Esta es “Otra” experiencia provocada por una amenaza de daño corporal o muerte. No es una experiencia fuera del cuerpo o ECM. Existía la amenaza de daño corporal por el ataque de un perro.

Elementos de la ECM:

¿Se sintió separado de su cuerpo?

¿En qué momento de la experiencia estuvo en su máximo nivel de consciencia y alerta? Me sentí hiper alerta, como cuando estás muy ansioso.

¿El tiempo pareció acelerarse o ralentizarse? Todo parecía estar sucediendo a la vez; o el tiempo se detuvo o perdió todo significado

Compare por favor su visión durante la experiencia con su visión cotidiana que tenía inmediatamente antes del momento de la experiencia. Sin cambios

Compare por favor su audición durante la experiencia con su audición cotidiana que tenía inmediatamente antes del momento de la experiencia. Sin cambios

¿Pasó hacia o a través de un túnel? No

¿Encontró o llegó a ser Consciente de algún ser difunto (o todavía vivo)? Si Sentía la presencia de Seres pero no pude verlos. Tuve la sensación de que había tres de ellos. No sabía qué o quiénes eran. En ese momento, especulé que podrían ser ángeles o fantasmas. Supe que eran benévolos y no les tenía miedo. Se comunicaron conmigo telepáticamente. Me rodearon de una manera protectora y erigieron un “muro” invisible a mi alrededor.

¿Vio una luz sobrenatural? No

¿Le pareció entrar a algún otro mundo sobrenatural? Un reino claramente místico o sobrenatural

¿Qué emociones sintió durante la experiencia? Ansiedad, miedo, confusión

¿Le pareció de repente entenderlo todo? Todo sobre el Universo

¿Vinieron a usted escenas del futuro? Escenas del futuro del mundo Solo tenía conocimiento del futuro inmediato y sucedió.

¿Alcanzó un límite o una estructura física limitante? Si

Dios, espiritualidad y religión:

¿Qué importancia le daba a su vida religiosa / espiritual antes de su experiencia? Incierto Católica/metodista

¿Cuál es su religión ahora? Liberal Espiritualidad cristiana episcopal/celta muy liberal Soy miembro de una comunidad monástica.

¿Ha tenido un cambio en sus valores y creencias debido a su experiencia? Si Después de esta experiencia creí que compartimos este mundo con seres invisibles. También creía que estos seres, los ángeles, el difunto, Dios, juegan un papel activo en la historia humana. Dios no es el relojero. El cielo y la tierra están interactuando continuamente.

Con respecto a nuestras vidas terrenales aparte de la religión:

¿Qué cambios de vida ocurrieron en su vida después de la experiencia? Si Este y otros que he tenido.

Después de la ECM:

¿Fue la experiencia difícil de explicar en palabras? No

¿Ha tenido tras la experiencia dones psíquicos, no ordinarios u otros dones especiales que no tuviera antes de la experiencia? Incierto

¿Hay una o más partes de la experiencia que son especialmente significativas o importantes para usted? La mejor parte fue que ninguno de nosotros estaba seriamente herido y sentí que se me había dado la oportunidad de advertir a mi hermano y hermana lo que tal vez los salvó de un daño más grave. Lo peor fue mi culpa como sobreviviente.

¿Ha compartido usted alguna vez esta experiencia con otros? Si La compartí cuando era adulta. La respuesta varió desde el reconocimiento cortés hasta la incredulidad. No creo que la gente lo entendiera, lo cual está bien porque yo tampoco.

¿En cualquier momento de su vida, ha habido alguna vez algo que le haya reproducido parte de la experiencia? Si Tuve una experiencia ANTES de esta en la que un ser invisible me salvó de morir cuando era niña, y una experiencia DESPUÉS de esta en la que creo que me salvó de una sobredosis de drogas/ alcohol.