Descripción de la experiencia:

Cuando tenía 19 años, descubrí que mi novia me estaba engañando con uno de mis mejores amigos. Así que tragué varias botellas de drogas con una botella de ron. Mi mamá llamó a una ambulancia y fui al hospital. Antes de llegar allí yo estaba inconsciente. Normalmente tengo sensación de euforia después de tomar drogas; tanto como borracho. No sé cuánto tiempo pasó, pero lo siguiente que supe fue que me sentí como si estuviera en la cama y me deslizara hacia mi izquierda. No me sentía borracho, ni aturdido en absoluto. Instintivamente intenté agarrarme de la cama y levantarme de un salto. Estaba abrumado por el pánico. Vi imágenes de una casa, un automóvil Jaguar y personas que nunca antes había visto en mi vida. Inmediatamente me tiraron contra la camilla. Abrí los ojos y vi a un médico encima de mí, dándome un masaje cardíaco. Traté de sentarme pensando que se apartaría, pero no lo hizo. Una vez más, me acerqué a él y vi imágenes de su esposa, sus hijos y su automóvil. Sentí pánico en él. Fui abrumado y repelido por estas visiones. Fui impactado contra la mesa.

Me estaba deslizando hacia la izquierda de nuevo y miré a la derecha viendo mi propio cuerpo a mi lado. Cuando miré hacia la izquierda, vi un destello de luz azul. Mientras miraba hacia la esquina de la habitación para ver mejor, vi una columna de luz que descendía hasta el suelo. Escuché una voz proveniente de mi derecha decir: 'Está bien, te salvaremos'. Mientras miraba, vi lo que parecía un hada azul tomándome de la mano. Vislumbré una luz verde que se dirigía a mi izquierda, pero tomó mi mano y la levantó por encima de mi cabeza. No pude ver qué era porque los dos juntos me empujaron hacia el lado derecho de la habitación en la esquina. Los sacudí para poder ver lo que estaba pasando. Vi al médico encima de mí tratando de reanimarme, una enfermera a la cabeza poniéndome una máscara de oxígeno o algo así, y a mi mamá en la puerta con los brazos cruzados. El angelito azul dijo: 'No tenemos tiempo, tenemos que darnos prisa'.

Cuando comencé a comprender realmente la situación, me llevaron a la columna de luz y viaje. El movimiento y las luces parecían hacerme sentir un poco mareado, así que cerraba los ojos un rato y los abría de vez en cuando por pura curiosidad. Vi un camino con la proverbial 'escalera al cielo' con alguien guiado por un perro. A la larga, vi nubes. Mientras trataba de mirar por encima del hombro y bajar al suelo, vi una gran multitud de personas de pie frente a la puerta del cielo. Los angelitos me dejaron justo dentro de la puerta y a la derecha de ella en una habitación. Me arrodillé con los ojos cerrados durante un minuto. Hacía tanto frío, y mientras pensaba eso, se detuvo. Abrí los ojos para ver que estaba en una habitación con paredes de nubes. Comencé a caminar hacia las nubes y una voz me dijo: 'No lo hagas. Te arrepentirás. Estarás perdido para siempre'. Me di la vuelta y estaba bastante enojado porque tenía la intención de matarme para morir. Me estaba dando cuenta de que esto no es lo que deseaba. No estaba muerto, era vivir en un lugar diferente.

Yo era un arrogante y enojado joven de 19 años. Pensé para mí mismo: 'Así que este cielo. Al menos podrían haberme dado un banco o algo para sentarme'. Justo cuando miré hacia un lugar donde habría puesto uno, había un banco de mármol blanco. Pensé: 'Genial, un banco de mármol. Apuesto a que va a estar frío'. Pero no era así. Cuando me senté en el, una esquina de la habitación se volvió plana. Las nubes comenzaron a oscurecerse y a arremolinarse. Se abrió como la puerta de un ascensor, y había tres figuras de pie allí se adivinaban entre la luz brillante. Podía sentirlas además de verlas. Una de ellas era mi abuela, y otra, una señora muy anciana, le dijo: 'Mira, te lo dije' a mi abuela. La tercera era una niña que entró volando a la habitación con un chillido de alegría y se sentó a mi lado. La puerta se cerró y ella me preguntó qué pasó. No soy muy bueno contando mis problemas a personas que no conozco, pero su compasión y naturaleza cariñosa parecían sacarlo todo de mí. Ella me llevó a varios viajes.

El primero fue como la historia de navidad de Scrooge (N del T:de la novela: “cuento de navidad” de Charles Dickens). Ella me mostró cosas de mi pasado que eran significativas. Cosas que había hecho que impresionaron a la gente y cosas que la gente dijo que nunca supe. Ella me mostró a las personas que se verían afectadas por mi muerte; las personas que se verían afectadas por mi vida. Realmente no tuvo mucho efecto en mi yo egoísta y arrogante de 19 años.

Lo siguiente que supe fue que me estaba despertando en un campo de hierba en un día soleado. Podía escuchar voces sureñas, un acento montañés de una chica y un par de chicos. Se reían y payaseaban de una manera realmente estúpida. Traté de levantarme lenta y silenciosamente para mirar por encima del césped y ver quienes eran. Vi una vieja choza en ruinas. Cuando una brisa atravesó la hierba percibí un olor muy desagradable. Finalmente vi a las personas que estaban hablando, pero no eran personas. Llevaban overoles, pero tenían caras de chacal. Ellos me notaron y vinieron corriendo. Me preguntaron quién era y de dónde venía. En ese momento, uno de ellos señaló al cielo.

Mientras miraba, vi aparecer una línea y el cielo se abrió. Una criatura gigante y marrón saltó y aterrizó a mi lado. Tenía cuernos por toda la cabeza, 5 ó 6 ojos y maldecía violentamente. No era como las criaturas detalladas que verías en una película. Era más como una caricatura. Olía muy mal y era muy difícil de escuchar. Sus palabras estaban llenas de maldiciones e insultos. No recuerdo todo lo que dijo, pero me agarró y saltó al agujero en el cielo. Aterrizamos en una plataforma en el espacio, con una pared de lo que parecían pantallas de televisión. En realidad eran cubos. Había un panel de control como un podio. Me dijo que esto era un infierno y que en cada cubo había un infierno hecho a medida para cada alma. Explicó que la gente se adapta a todo tipo de infiernos, y que algunas personas son más tolerantes a algunas cosas que a otras, por lo que el infierno siempre está cambiando. Él disfrutaba mucho de ver sufrir a la gente.

Mientras caminaba a lo largo de la pared de cubos, fui succionado por uno de ellos y me encontré en una pequeña habitación blanca con una puerta y un estante. Pronto se abrió la puerta y entraron un chico y una chica muy guapos. Fueron muy amables conmigo y me preguntaron si podían conseguirme algo. Generalmente en situaciones desconocidas, no como, ni bebo. Así soy. Tengo que estar perfectamente cómodo antes de darme un capricho. Así que seguí diciendo 'No', pero siguieron molestándome hasta que se volvió tan molesto que finalmente les dije: 'Claro, un sándwich y una coca cola'. Se fueron y regresaron con un bocadillo y una coca cola. Yo era escéptico, así que los dejé reposar en el estante. Luego empezaron a molestarme para que le diera un mordisco y lo disfrutara. Finalmente cedí y le di un mordisco, pero lo miré para asegurarme de que era lo que pensaba que era. Después de morderlo, el sabor me repugnó por completo. Era tan rancio que lo escupí y agarré la coca que estaba igual de mala. Tuve que escupirla también. Se rieron y rieron mientras yo intentaba quitarme el sabor rancio de la boca. Realmente gracioso, ja, ja. Luego se disculparon y se ofrecieron a traerme otro. Dije: 'No, gracias' y nuevamente comenzaron a convencerme de que solo estaban bromeando y que no volvería a suceder. Finalmente dejé de hablar con ellos y comencé a ver que estas dos personas guapas en realidad tenían caras de chacal con una máscara transparente o algo así. Me di cuenta de que podía ver a través de sus máscaras y todo esto era solo una forma de torturarme. Me levantaron y me sacaron del cubo en un torbellino. Cuando salí de la plataforma, pude escuchar al diablo gritar: '¡Nooooo!'

Lo siguiente que supe era que me mostraban flashes de todas las cosas malas que había hecho en mi vida, y me estaban poniendo en el lugar de las otras personas a las que le estaba haciendo cosas malas. Podía ver lo insensible que yo era con la gente y ni siquiera lo sabía. Era insoportable y abrumador revivir cosas que había olvidado, o que simplemente no me importaron. Me hicieron sentir la forma en la que hacía sentir a los demás. Yo tenía tanto frío y estaba temblando.

Me di cuenta de que estaba en un sitio. Abrí mis ojos llenos de lágrimas y me encontré arrodillado en un tipo de cueva. Tenía un techo bajo y un suelo húmedo y frío, y estaba muy oscuro. Me sentí tan solo y abandonado. Empecé a intentar moverme por la cueva en la oscuridad. Fue difícil porque no podía gatear sin mojarme y no podía levantarme porque el techo era muy bajo. No quería mojarme porque tenía mucho frío. Pronto vi una luz ámbar adelante, esperaba que hiciera más calor cerca de esta luz. Pude ver a otras personas cerca de la luz y encontré una multitud de personas arrodilladas al lado de una abertura. Me di cuenta de que había fuego adentro. Vi a una niña arrodillada con las muñecas cortadas, un Hombre con una cuerda alrededor del cuello y otro con la parte de atrás de la cabeza volada. Podía escuchar gritos provenientes de delante de la cueva, y estaba tratando de que una de estas personas me hablara y me dijera dónde estaba. Uno de ellos me dijo que me callara o sería el siguiente. Luego, un enorme y feo demonio salió de la cueva, los agarró y los arrastró a la cueva. Me preocupé de ser el próximo. Me arrodillé. Cuando cerré los ojos, volví a abrumarme con visiones y emociones de todas las malas acciones de mi vida. Abrí los ojos y me di cuenta de que no podía cerrarlos a menos que quisiera verlas. Miré a mi alrededor y me di cuenta de que por eso todos parecían un montón de zombis. No puedes cerrar los ojos. No puedes hablar con los demás. No puedes ponerte de pie. No puedes sentarte. Solo puedes arrodillarte allí sobre la punta de los dedos de los pies y las puntas de las rodillas. Todo lo que podía hacer era mirar fijamente el agujero de fuego, escuchar los gritos y esperar no ser el próximo.

Vi a un Hombre con una túnica que tenía unos 40 años, con la barba recortada y la cabeza calva. Pensé que parecía un monje y me pregunté si era Judas. Después de mucho tiempo, mis ojos comenzaron a arder tanto que finalmente decidí que valía la pena aguantar los malos recuerdos si pudiera cerrar los ojos un momento. Comencé a sollozar en silencio cuando los recuerdos de mis malas acciones se precipitaron y escuché una voz. Decía: 'Si lo pides, tal vez te salve'. Pensé para mí mismo, '¿Cómo?' La voz dijo: 'Dilo. Di las palabras: Jesucristo, mi salvador en los cielos, por favor sálvame'. Dije las palabras en voz alta. La voz dijo: "Otra vez", así que lo dije una y otra vez. Los gritos cesaron y luego los malos recuerdos cesaron. Estaba en silencio.

Cuando miré hacia arriba, vi a un Hombre sentado en una silla de piedra gigante. Junto a él había una criatura de alas plateadas que tenía un casco con alas. Había una Mujer a su izquierda. Tenía unos hombres muy viejos detrás de ella. Estábamos en una plataforma en el espacio, pero las estrellas eran ojos. Me di cuenta de que este era Jesús y la criatura a su derecha era el ángel del señor, y la Mujer a su izquierda era la Santísima Virgen María. Solo puedo suponer que los ancianos tenían que ser Abraham, Moisés o una de esas personas importantes; tal vez los discípulos Pedro, Pablo o alguien. Jesús tenía una expresión de decepción en su rostro que me tocó el alma y me hizo sentir muy avergonzado.

El ángel del Señor dijo: "Dile a nuestro señor lo que te trae por aquí". Comencé a explicar que sentía que el mundo no era un lugar justo y que ya no quería ser parte de él. Me miró como si estuviera loco y me preguntó: '¿Quién te dijo que iba a ser un mundo justo?' Realmente no entendí. La jovencita que conocí por primera vez en el cielo se abalanzó y me llevó a un gran salón que estaba un poco oscuro. Estábamos en una gran puerta. Cuando le pregunté dónde estábamos, me dijo que tenía algo que mostrarme. Se abrió la puerta y salió un grupo de personas. Vi a un grupo de un sacerdote que reconocí de otra experiencia religiosa que tuve en Versalles cuando era niño. Tuve un breve recuerdo de esa experiencia. Cuando la habitación se vació, entramos.

Estaba oscuro y había una gran mesa redonda con una pantalla tridimensional en el medio del universo. Había un anciano. Cuando ella me llevó, él preguntó: "¿Y por qué estás aquí?". La niña explicó que yo sentía que la vida me había tratado mal y pensaba que era injusto. Él pensó que era absurdo que yo pensara tal cosa, y en resumen comenzó a explicar que el globo sobre la mesa era el universo y que todas las estrellas tenían significados y sus disposiciones tenían significados. Cuando las personas nacen, la disposición de las estrellas en el universo tenía un efecto sobre ellas y la vida que llevarían. Explicó que el cielo era un lugar seguro donde las almas están protegidas y cuidadas por el señor. Todos tienen su propio estatus, y ese estatus está determinado por lo que ha hecho y aprendido en los mundos materiales. Explicó que la gente rara vez está contenta con el lugar donde está mucho tiempo y que siempre está deseando seguir adelante. Las almas en el cielo no son diferentes. Explicó que vine a este consejo pidiendo nacer en el mundo material. Explicó que les presenté un caso muy bien pensado, y que empleé la ayuda de muchas personas sabias para determinar exactamente dónde y cuándo nacería y de quién nacería. Elegí mi propio nombre por una razón muy clara, y si hay alguien a quien culpar por la vida que estoy viviendo, ese soy yo. Explicó que firmé un contrato con el creador y debo cumplir con ese contrato o enfrentar las consecuencias. Terminó todo el discurso diciéndome que sabía en lo que me estaba metiendo, que conocía los riesgos y complicaciones, y que me habían advertido. Mi única opción era volver atrás y terminar lo que comencé. No dije ni una palabra. Para mí, a los 19 años, esto realmente no iba muy bien. Pensé que solo era un anciano mezquino con una mala actitud, especialmente porque nos echó de la habitación y nos cerró la puerta de golpe.

Me encontré de nuevo en la plataforma ante Jesús. La Santísima Madre me preguntó qué pensaba de lo que había aprendido. Le dije que pensaba que no estaba bien que tuviera que soportar que la gente me lastimara, que se suponía que Jesús me protegiera, y que si iba a volver, quería que él lo arreglara. Él me miró y dijo: 'Hijo mío, no puedo causarle dolor a otro, solo puedo curar a los que están rotos'. Con la arrogancia de la juventud, traté de tirar de la vieja rutina de 'quiero hablar con el gerente' y exigí hablar con Dios. La Santísima Madre dijo: 'No puedes 'ver' a Dios'. Jesús habló y dijo: 'Nadie puede ver a Dios'. La bendita madre estaba enojada y me dijo que me arrodillara ante este gran sanador y le pidiera perdón. Me arrodillé. Podía sentir gran decepción y asombro por mi arrogancia. Comencé a llorar y Jesús preguntó: '¿Sabes por qué te salvé del pozo del purgatorio?' Yo respondí, 'No'. Él dijo: '¿Recuerdas al anciano?, el que pensabas que era Judas. Esto me mostró que crees, realmente crees''. En ese momento me di cuenta de que Jesús estaba conmigo y había estado conmigo todo el tiempo. Siempre estuvo conmigo, a lo largo de todo lo que ha pasado. Y que mi fe significa mucho más de lo que jamás me había imaginado. Vio algo en mí que ni siquiera yo vi. Empecé a llorar tanto que me quedé bloqueado en el suelo con la cabeza entre las manos y llorando incontrolablemente.

La Santísima Madre me ordenó que me acercara y le besara a él los pies. Fue como intentar arrastrarme con un bloque de cemento en mi espalda. Si midiese el tiempo, tardé como cinco minutos gateando un metro y medio. Cuando alcance sus pies, vi que estaban sucios y maltrechos, como los de una persona que nunca ha usado zapatos y que ha caminado a todos lados toda su vida. Hubiera preferido besar el trasero de un babuino que estos pies, con las uñas amarillas partidas. Pero los besé.

Después de hacerlo, pude sentir que me arrastraban de regreso al mundo material y grité que quería quedarme. 'Jesús', dije: 'Dame una oportunidad, dame la oportunidad de hacerlo bien al final'. Pensé: 'Genial. Al final. Eso significa que todo será jodido hasta que muera. Al final ¿cuándo será eso? Creo que fue la madre María quien luego me dio un mensaje, fue un mensaje muy comprimido que tenía palabras, imágenes y emociones mezclados. Se me mostró una visión de hechos futuros que en su mayoría se han hecho realidad. Eran cosas que nadie podría haber predicho. Cuando entré al túnel para regresar, vi una visión de un círculo con un ojo en el medio, y mientras giraba pude ver escenas a su alrededor como un reloj de personas y lugares moviéndose a la vez. Me di cuenta de que este era Dios. Y él me había permitido verlo de la única manera que yo podía entender. Fue un gran consuelo recibir esa imagen, a pesar de que Jesús mismo dijo que no podía ver a Dios. El sentimiento que tuve cuando me di cuenta de que Jesús estaba allí conmigo todo el tiempo, ahora me lo había dado Dios mismo. Y me fui en paz.

Cuando volví a entrar en mi cuerpo, pude sentir los latidos de mi corazón. Sentí el dolor, el calor y la incómoda sensación de haber estado acostado en el mismo lugar durante mucho tiempo. No podía responder de ninguna manera y estuve en coma durante tres días después. Ocupé mi mente repasando los hechos una y otra vez porque sentía que podría olvidarlos. En un momento, sentí una mano cálida en la mía y luché por abrir los ojos para ver quién era. Vi a una chica joven con cabello largo y castaño parada junto a mi cama y sosteniendo mi mano. Cuando desperté le pregunté a la enfermera quién era y adónde había ido. Se veía tan sorprendida cuando la describí, luego me explicó que no había niñas en la unidad de cuidados intensivos y que no se había permitido a nadie cruzar el cristal en tres días. Las únicas personas habían sido las mismas cuatro mujeres, mayores, en turnos de 12 horas y todas habían trabajado allí durante años. Pensé que esto podría haber sido un sueño, pero ella me explicó que estuve muerto durante seis minutos y que había estado en la unidad de cuidados intensivos durante tres días.

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El martes, 28/6/16, Jeffrey Long, M.D. escribió:

¡Gracias por compartir su extraordinaria experiencia cercana a la muerte con nderf.org!

Podría hacerte todo tipo de preguntas sobre tu increíble ECM, pero solo haré una pregunta. En lo que compartiste, dices: Vi a un Hombre con una túnica de unos 40 años con una barba recortada y una cabeza calva. Pensé que se parecía a un monje, y me pregunté si se trataba de Judas... Jesús preguntó: '¿Sabes por qué te salvé del pozo del purgatorio?' Yo respondí, 'No'. Él dijo: '¿Recuerdas al anciano, el que pensabas que era Judas? Esto me mostró que crees, realmente crees''.

¡Cualquier comentario adicional que hagas sobre esto será muy apreciado! ¿Tienes una idea de lo que Jesús quiso decir cuando dijo: "Esto me mostró que crees, que realmente crees". ¿Creer qué? ¿Tiene una idea de lo que hubiera pasado si no hubiera creído? ¡Gracias de nuevo por compartir una de las ECM más notables jamás compartidas con NDERF!

Saludos cordiales,

Jeffrey Long, MD

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Respuesta de Jeffrey C:

En ese suceso, estaba confundido en ese momento porque no entendía cómo el Señor de este mundo que todo lo ve, todo lo sabe, no podía saber ya que yo creía (Primera pista). Creo que vio un pequeño rayo de luz en el interior de un alma muy oscura. No estaba hablando con él, no traté de convencerlo de que creía. Estaba teniendo lo que pensé que era un pensamiento privado. Reunió su prueba no de mis palabras sino como un voyeur (Segunda pista). Quería mostrarme que él estaba allí en mis pensamientos privados. Mi duda de ese momento era que si él puede ver mis pensamientos privados ¿cómo es que no lo sabía? (Solución) La respuesta es que sí lo sabía. El punto era que quería demostrarlo. En resumen, no creo que haya un ultimátum. Con la edad, comprendo por qué se ve a Dios como un padre. Y con la perspectiva de un padre en mente, creo que se describe mejor con el dicho: Cuando tus hijos son adolescentes, sabes que te aman, solo deseas que lo demuestren de vez en cuando. Si Dios quiere que creas, lo hará. No hay ateos en las trincheras. Me llevará al punto del suicidio, me llevará a su sala de estar, me convertirá en un creyente y luego me enviará de regreso. No hay discusión sobre 'si crees esto' o 'si no crees aquello'. No puedo negar un huracán cuando está tras mi puerta. Lo más profundo que Dios me ha dicho es una larga historia, en resumen: 'A veces tienes que dejar que la gente fracase por sí misma'. A veces puedes dar consejos, advertir a una persona, suplicarle y suplicarle, pero esto solo provoca resentimiento. La única manera de que aprendan o se den cuenta de que solo tienes en mente tus mejores deseos es dejarlos fallar, y tras eso, estar allí para ayudar a recoger los pedazos. No hubo 'te lo dije'.

Contexto

Género: Masculino.

Fecha de la ECM: 1989.

Elementos de la ECM

En el momento de la experiencia, ¿hubo algún suceso potencialmente mortal? Incierto. Intento de suicidio. Muerte clínica (cese de la respiración o de la función cardíaca). Estaba muerto, me desperté con un médico que me estaba haciendo RCP. Vi mi cuerpo tendido a mi lado.

¿Cómo considera el contenido de su experiencia? Tanto placentero como angustioso.

La experiencia incluyó: Experiencia fuera del cuerpo

¿Se sintió separado de su cuerpo? Sí. vi al médico trabajando en mí, a las enfermeras tratando de llevar el equipo a la habitación y a mi madre con los brazos cruzados mirando. Vi a mi mamá preocupada por mí en el trabajo. Vi más pero no recuerdo. Claramente dejé mi cuerpo y existí fuera de él.

¿Cómo fue su mayor nivel de conciencia y alerta durante la experiencia, comparado con su nivel cotidiano? Más conciencia y alerta de lo normal. No sentí las debilidades normales del cuerpo humano. Podía sentir a los demás; No me sentí olvidado de ninguna manera.

¿En qué momento de la experiencia tuvo su máximo nivel de conciencia y alerta? Cuando desperté muerto y acostado en la mesa.

¿Sus pensamientos se aceleraron? No.

¿Le parecía el tiempo acelerado o enlentecido? No.

¿Sus sentidos eran más intensos de lo habitual? más intensos de lo normal.

Por favor compare su visión durante la experiencia, con la suya cotidiana previa a la experiencia Igual. Lo he repasado miles de veces debido a todas las cosas que se predijeron y que se han hecho realidad, y todas las lecciones que he aprendido a lo largo de los años y que no entendí en ese momento.

Por favor, compare su audición durante la experiencia con la suya cotidiana previa a la experiencia. No noté ninguna diferencia.

¿Parecía enterarse de cosas que ocurrían en otro lugar? Sí, pero no he confirmado la información.

La experiencia incluyó: Túnel

¿Pasaste a través de un túnel? Sí. Había una columna de luz como un foco en un ángulo de 45 grados. Cuando entré, era un remolino de colores y un líquido brillante que fluía. Era como montar en una montaña rusa a través de un espectáculo de luces. Tenía los ojos cerrados la mayor parte del tiempo porque era abrumador y me hacía sentir un poco enfermo. (Punto interesante) Justo antes de entrar en la luz, un gran miedo me abrumó, como cuando era un niño a punto de entrar a la oficina del director. Tenía la sensación de que juzgaban del otro lado, como si un grupo me estuviera mirando en un juicio. Es la mejor explicación que puedo dar.

La experiencia incluyó: Presencia de fallecidos.

¿Viste algún ser en la experiencia? Los vi.

¿Encontró o percibió a algún ser fallecido (o vivo)? Sí, no vi a ningún familiar, ni a la gente que conocí en vida, pero había gente que me conocía. Sentí que los conocía y me eran familiares. Vi a algunos sacerdotes, específicamente uno al que conocí cuando era niño en Versalles.

La experiencia incluyó: Oscuridad.

La experiencia incluyó: Luz sobrenatural.

¿Viste o sentiste que te rodeaba una luz brillante? No.

¿Viste una luz sobrenatural? Sí. Las luces del túnel. Al principio, cuando entré, vi luz. Era un mundo brillantemente iluminado. Cuando la puerta se abrió a la habitación en la que estaba, vi la misma luz brillante. El resto del tiempo, estaba oscuro y, a veces, parecía el espacio. Finalmente, me di cuenta de que lo que pensaba que eran estrellas en realidad eran ojos.

La experiencia incluyó: Un paisaje o una ciudad

¿Parecías entrar en un mundo sobrenatural o de otro tipo? Un reino claramente místico o sobrenatural.

La experiencia incluyó: Imágenes infernales

La experiencia incluyó: Fuerte tono emocional

¿Qué emociones sintió durante la experiencia? Casi todos, parece.

¿Tuviste sensación de paz o de amabilidad? No.

¿Tuviste sensación de alegría? No.

¿Sentiste armonía o unidad con el universo? No.

La experiencia incluyó: Conocimiento especial o propósito.

¿De repente parecía entenderlo todo? Todo sobre mí o los demás. Después de la experiencia, fui internado en un pabellón psiquiátrico. Parecía que la naturaleza comprensiva y amable de la niña que me guió se había convertido en parte de mí y, como dijo la médica, 'ayudé a más personas en una semana que ella en un año'. Me volví más empático y consciente de las personas... ¿Problemas? Difícil de explicar, supongo.

La experiencia incluyó: repaso de mi vida

¿Vinieron a ti escenas de tu pasado? Mi pasado pasó ante mí, fuera de mi control. Recuerdos de cosas que había hecho que eran buenas, malas. Todas las cosas que había hecho. También me pusieron en el lugar de aquellos con quienes interactué y sentí lo que sentían mientras sucedía.

La experiencia incluyó: Conocimiento del futuro

¿Te vinieron escenas del futuro? Escenas de mi futuro personal. Recibí un mensaje de Mary sobre mi futuro. Entre otras cosas, emociones, escenas, que empezarían cuando me rompiera la espalda. De hecho, todo se hizo realidad. Las emociones que no entendía surgieron y de repente, después de 20, o más años, las entendí. Me rompí la espalda y todo lo mencionado se hizo realidad a la edad exacta que me dijeron que tendría. También me dieron destellos de cosas que sucederían, al principio cuando sucedió lo similar a Scrooge.

La experiencia incluyó: Límite

¿Alcanzó un límite o una estructura física limitante? Sí. Mientras caminaba hacia una pared de nubes para intentar avanzar, me dijeron que me arrepentiría.

¿Llegaste a un borde o punto de no retorno? Llegué a una barrera que no se me permitió cruzar; o fui enviado de regreso en contra de mi voluntad.

Dios, espiritualidad y religión

¿Qué importancia le daba a su vida religiosa / espiritual antes de su experiencia? No era importante para mi.

¿Cuál era su religión antes de su experiencia? No sabía que creía en Dios y en Jesús, y no estaba viviendo una vida cristiana y realmente desconocía su existencia real.

¿Han cambiado tus prácticas religiosas desde tu experiencia? Sí. tengo una relación con Dios y sus siervos. Me doy cuenta de que el "libre albedrío" es tanto una maldición como un regalo. Mejor dicho: es como si fuéramos como niños. Cuando en el cielo estamos adentro y seguros, eventualmente rogamos salir. Lo que sucede cuando estamos afuera es obra nuestra. Es mejor quedarse en tu propio jardín.

¿Qué importancia tiene su vida religiosa / espiritual después de su experiencia? Es muy importante para mi.

¿Cuál es tu religión ahora? Cristiano - Otro cristiano. Veo tantos problemas verdaderamente perturbadores con las religiones organizadas, que defino mi religión solo por mi relación con Dios y Jesús y los siervos del Señor.

¿Su experiencia incluyó características consistentes con sus creencias terrenales? El contenido era y no, consistente con las creencias que tenía en el momento de la experiencia. yo creía en Dios y en Jesús, pero no sabía nada del resto.

¿Tuviste un cambio en tus valores y creencias debido a tu experiencia? Sí. Era un traficante de drogas alcohólicas que se había convertido en un matón. Pasé a trabajar para una empresa de seguridad a nivel nacional, luego instalé sistemas de seguridad y cámaras, y luego más y más.

La experiencia incluyó: Presencia de seres sobrenaturales

¿Te pareció encontrar un ser o presencia mística, o escuchar una voz no identificable? Escuché una voz que no pude identificar. Las comunicaciones eran mediante pensamientos, así que tuve problemas, a veces, para saber quién me hablaba.

¿Viste espíritus de difuntos o religiosos? Los vi.

¿Encontró o sintió cualquier ser que vivió en la tierra y cuyo nombre es descrito en religiones (por ejemplo: Jesús, Muhammad, Buda, etc.)? Sí, Jesús, María y algunos no me fueron presentados, pero sentí su conexión con Jesús.

Durante su experiencia, ¿obtuvo información sobre existencia premortal? Sí, el anciano me dijo en la sala del consejo que vivimos y experimentamos tantas vidas como podamos para ganar experiencia.

Durante su experiencia, ¿obtuvo información acerca de la conexión universal o la unidad? Incierto. O no comprendo la pregunta o no entendí la información tal como fue dada. El concepto de Uno / unidad no me era conocido, ni entendido a los 19 años.

¿Creías en la existencia de Dios antes de tu experiencia? Creo que Dios probablemente existía.

Durante su experiencia, ¿obtuvo información acerca de la existencia de Dios? Sí. Me dijeron que nadie puede 'Ver' a Dios. Al final de la experiencia, se me mostró una imagen de Dios, entendí que era Dios y entendí que era una imagen personalizada hecha para mí de una manera que yo entendería. Dios definitivamente existe.

¿Qué crees sobre la existencia de Dios después de tu experiencia? Creo que Dios definitivamente existe.

Acerca de nuestra vida terrenal no religiosa

Durante su experiencia, ¿obtuvo conocimiento o información especial sobre su propósito? Incierto. He tenido muchas experiencias espirituales muy importantes. Experiencias religiosas. Incluso me han hablado de un ser superior, tal vez Dios. Sé que hay un propósito y me están llenando de conocimientos al necesitar bases, algunas cosas se respondieron en una conversación donde me dijeron: 'Tengo preguntas, pero no cuestiono'.

¿Creías que nuestras vidas terrenales eran significativas y relevantes antes de tu experiencia? Creía que no.

Durante su experiencia, ¿obtuvo información sobre el significado de la vida? Sí. El anciano en la sala del consejo me dijo que vivimos y experimentamos tantas vidas como podemos para ganar experiencia y acercarnos más a Dios. Como un niño que crece para poder tener una relación adulta con su padre.

¿Creías en una vida después de la muerte antes de tu experiencia? Creía que era incierto.

¿Crees en “la otra vida” tras la experiencia? Definitivamente existe. Sí. Me explicaron que nunca moriremos; simplemente hacemos transiciones a través de experiencias para acercarnos a Dios. "Creados a su imagen" parece significar vivir y experimentar tantas vidas como Dios.

¿Temías la muerte antes de tu experiencia? Mucho.

¿Temes la muerte después de tu experiencia? No.

¿Estabas temeroso de vivir tu vida antes de tu experiencia? No.

¿Temes vivir tu vida después de tu experiencia? No.

¿Creías que nuestras vidas terrenales eran significativas y relevantes antes de tu experiencia? Creía que no.

¿Crees que nuestras vidas terrenales son significativas y relevantes después de tu experiencia? Sí.

¿Obtuvo información acerca de cómo vivir nuestras vidas? Sí. Me mostraron que la perspectiva es relevante. Un ejemplo, es la diferencia entre ver un accidente en la televisión y vivir un accidente. La vida aquí es real para nosotros, pero en la próxima vida, la actual no será diferente a recordar una película (N del T: esta vida será como haber tenido un sueño).

Durante su experiencia, ¿obtuvo información sobre las dificultades de la vida, los retos y miserias? Sí. El consejero anciano me hizo comprender que los desafíos de la vida son los que nos dan experiencia y, a veces, se interponen cosas en nuestro camino para cambiar cosas. Una llanta pinchada en la autopista puede parecer un problema, pero puede haberlo ayudado a evitar un accidente en el camino.

¿Era compasivo antes de su experiencia? Poco.

Durante su experiencia, ¿obtuvo información sobre el amor? No.

¿Fue compasivo después de su experiencia? Mucho.

¿Qué cambios ocurrieron en su vida después de su experiencia? Grandes cambios en mi vida. Difícil de explicar. Una intuición intensificada. Por un breve tiempo, hace unos años, una habilidad extrema para conectar psíquicamente, hasta que le pedí a Dios que por favor lo detuviera. Es muy parecido a comprar anteojos cuando ni siquiera sabías que los necesitabas.

¿Sus relaciones han cambiado específicamente debido a su experiencia? Sí. no soy tan crédulo como era. Me resulta difícil tener una relación realmente significativa con personas que no se dirigen a la realidad en la que me encuentro actualmente. En resumen, puedo ver más fácilmente los motivos de las personas y tengo problemas para ser amigo de alguien cuyos motivos no son puros.

Tras la ECM:

¿Fue difícil expresar la experiencia con palabras? Sí. Aunque la experiencia es muy larga en mi descripción, hay algunas partes que faltan, y algunas partes estoy seguro que las he olvidado porque tuve que repasarlas en mi cabeza cientos de veces para estar seguro de que no las olvidaría. Cuando volví a entrar en mi cuerpo, me sentí muy confuso en comparación con cuando no estaba en mi cuerpo.

¿Con qué precisión recuerda la experiencia en comparación con otros sucesos que ocurrieron en su vida al momento de la experiencia? Recuerdo la experiencia con más precisión que otros hechos de la vida que ocurrieron en el momento de la experiencia. No recuerdo las fechas exactas de todo, y no recuerdo mucho sobre los meses previos al evento.

¿Tienes algún don psíquico, no ordinario u otro especial que no tenías antes de la experiencia? Sí. Me gusta decir que mi intuición es un poco más precisa. Por un breve tiempo, hace unos años, una increíble capacidad para conectar directamente con personas desde cualquier lugar. Me sentí abrumado y rogué que se detuviera y así se hizo.

¿Hay una o varias partes de su experiencia que sean especialmente significativas para usted? Hasta hace unos años y a medida que pasan los años, más y más se vuelve significativo.

¿Alguna vez ha compartido esta experiencia con otros? Sí. 20 años.

¿Tenía algún conocimiento de experiencia cercana a la muerte (ECM) antes de su experiencia? No.

¿Qué creías acerca de la realidad de tu experiencia al poco tiempo de que sucedió (días a semanas)? La experiencia definitivamente fue real. Sabía que era real porque era más vívida que cualquier sueño. Puedo controlar lo que sucede en mis sueños. No hubo experiencias o información exagerada que indicara fantasía. Pude razonar conscientemente como una persona "despierta". Tenía frío y no me desperté. En algunos momentos no tenía frío, como cuando estaba ante Jesús o en la sala del consejo. Finalmente, se me dio cierta información sobre los hechos que ocurrirían directamente después del suceso y años después; y años después de eso, todo se hizo realidad para confirmar la realidad del mismo.

¿Qué crees de la realidad de tu experiencia ahora? Definitivamente fue real. Se me dieron muchas señales de hechos que no podría haber sabido o predicho y que se han hecho realidad a lo largo del tiempo. Parece que todo lo que pasó estuvo tan perfectamente coordinado que me afectó el resto de mi vida. Ningún sueño o ilusión podría haberme dado un acertijo tal que se junta con cada año que pasa y siguiese formando una imagen tan perfecta. Comprende que la imagen tuvo que formarse antes de cortar el rompecabezas en pedazos. Cada pieza fue diseñada para ser encontrada y colocada correctamente, cuando fuera necesario y relevante. Eso es significativo.

En algún momento de su vida, ¿algo ha reproducido alguna parte de la experiencia? No.

¿Hay alguna otra pregunta que podamos hacer para ayudarlo a comunicar su experiencia? Cuando miro hacia atrás, veo que mi experiencia es muy similar a la historia de Scrooge: el mismo tipo de contenido y mensaje general. Parecería relevante preguntar: "¿Cuál crees que fue el mensaje general o el propósito de tu experiencia?".