Jill Probable ECM
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Descripción de la experiencia:
Debo haber estado recuperándome de la neumonía doble o tal vez estaba
todavía enferma; lo sé porque mi madre estaba obviamente observándome
cuidadosamente, o no se habría alarmado cuando me vio durmiendo esa mañana.
Recuerdo que era de día. Recuerdo claramente el evento y recuerdo a mi madre
despertándome a la fuerza; hablamos sobre esto cuando yo era ya adulta. Me
despertó porque pensó que estaba “muriendo”. Le dije: “déjame en paz, quiero ir
con la señora”. Recuerdo haber dicho esas palabras pero no recuerdo nada después
de eso.
Estaba en un lugar “marrón”; como terciopelo, marrón suave, reconfortante,
seguro. Un ser femenino estaba a mi derecha en una bruma dorada, como iluminada
desde el interior. Fui educada en la religión católico romana y tenía un gran
amor por la Madre Bendita (la
llamaba “mami bendita”) así que este ser parecía femenino y hablaba con voz
femenina. Me dijo que no tuviera miedo. Me contó sobre mi vida, que iba a ser
difícil y que Dios no iba a abandonarme. Me dió detalles, pero recién ahora
logré recordar uno que me dió, además del número 23. Me dijo que iba a tener un
“corazón roto”. De niña, pensé que significaba que había algo malo en mi corazón
y durante muchos, muchos años, fui seguido a los cardiólogos (tengo
contracciones ventriculares prematuras benignas pero estaba convencida, hasta
que tuve unos 30 años, de que mi corazón se detendría y no podría vivir las
experiencias que debía vivir). Ella me dió el número “23”. Mi madre me despertó,
interrumpiendo el éxtasis que estaba experimentando. Aún con mi mayor esfuerzo,
no logro “llegar” al mensaje completo.
Al principio pensé que el 23 era mi número de la suerte. Con el tiempo se
hizo aparente que el 23 de varios meses en distintos años, ocurrieron
experiencias que cambiaron mi vida: todas me llevaron a donde quería ir (o, al
menos, intentaba ir), de modo que, aunque algunas fueron dolorosas o
terroríficas, fue una progresión. Nunca olvidé esta “visión” (NO fue un sueño) y
me ayudó a continuar, con fe en que Dios estaría allí conmigo, durante mi
dificultosa infancia, adolescencia y adultez. Aún puedo “ver” el terciopelo
marrón y el brillo del ser que estaba conmigo si cierro los ojos y me concentro.
Puedo “verlo” especialmente si rezo el Rosario.
A los 39 años de edad, quedé embarazada el 23 de julio de 1986. Fue la única
vez que no usé anticonceptivos. Tuve una niña, nacida contra todos los
pronósticos ya que (sin que yo lo supiera) tenía un solo ovario funcional,
endometriosis y el útero inclinado. Me dijeron que me hiciera una amniocentesis
pero no quise. Cuando el médico me preguntó por qué (y me hizo firmar un
consentimiento absolviéndolo de cualquier responsabilidad legal), le dije
“aceptaré lo que sea que Dios me de”. Nunca olvidé esas palabras; lo dije de
verdad entonces, y lo creo ahora. Desde el comienzo del embarazo supe que había
algo “malo” con mi bebé. Quería desesperadamente una niña pero estaba convencida
de que era un varón. La ecografía de las 28 semanas mostró que era una niña.
Creo que mi bebé debía haber sido un varón (ella dijo desde la infancia que
tendría que haber sido un varón). Me pregunto si es posible que una mujer
determine el sexo de su bebé (otras especies lo hacen, por ejemplo pájaros). Mi
hija nació en circunstancias traumáticas por lo que podría haber muerto.
En resumen, después de atenderla cuidadosa y amorosamente en forma
constante, mi hija comenzó a fallar socialmente. Era extremadamente inteligente,
hermosa cuando niña, muy talentosa. Ella creía que “era de esta Tierra” y me
dijo muchas veces (desde pequeña) que ella nunca había pasado una vida en esta
Tierra, aunque había vivido muchas vidas. Durante su infancia, y hasta su
adolescencia, tuve cientos de comunicaciones psíquicas tanto de ella como de una
fuente desconocida (yo digo Dios). También he tenido cientos de experiencias de
origen extremadamente extraterrenales. Sé que esto suena como las locuras de un
psicótico pero estoy mentalmente sana. He sido tocada por Dios y otrs seres
vivientes, y tal vez seres espirituales en forma “humana”.
La enfermedad de mi hija comenzó a emerger realmente cuando tenía 16 a 17
años. De niña, “supe” cosas que solo ahora se han observado científicamente: que
todo está conectado, que todo está “vivo” y capaz de “consciencia” y que todo
está conectado. Ahora lo SÉ positivamente. Al progresar la enfermedad de mi
hija, “supe” que debía leer su email (lo hackeé). Cuatro veces impedí sus
intentos de suicidio y fue hospitalizada. Cuando cumplió 23, comprendí ese
número. Le dije a su padre que íbamos a perderla. Hice todo, absolutamente todo,
para evitar que ocurriera pero comencé a venirme abajo. Cuando estoy psíquica y
mi estabilidad emocional está comprometida, pierdo la “conexión”. Cuando estoy
viviendo con alguien que amo más que a la vida y esa persona está sufriendo de
psicosis avanzada, mi estabilidad disminuye severamente. Hace siete meses mi
dulce, inocente (nunca bebió, ni usó drogas, ni fumó, nunca tuvo una cita), muy
enferma (pero tomando antipsicóticos) hija, que había sido diagnosticada como
bipolar esquizo-afectiva (el peor diagnóstico de esquizofrenia) me dijo que
quería salir para cambiar su manta eléctrica. Lo único que explica mi total
FALTA de mi usual reacción fue que esto era intencional. Era su día para volver
a casa. Le di mi celular por si auto fallaba. Me llamó dos veces, la última vez
a las 4:23 pm el día 2 de marzo, a los 23 años de edad. Luego subió al asiento
trasero de su Jeep y se disparó con un revólver que había comprado en ese
momento con mi tarjeta de crédito.
Creo que el número 23 me fue dado para que estuviera preparada y pudiera
reconocer la sincronicidad de los números afectados, para protegerme de hacerme
algo estúpido a mi misma, porque el propósito de mi vida no estaba cumplido
todavía.
Tuve otra “visión” unos dos meses después de su muerte. En la única visión
que he tenido, estaba en un lugar “blanco”: no nubes, ni bruma blanca o pintura,
“blanco” y pacífico. Podía escucharla hablar con otros y una voz me dijo:
“estarás aquí, pero no ahora. Necesito algo de ti” y, cuando me desperté, una
mujer dijo mi nombre en mi oído izquierdo. Estaba despierta, estaba usando
tapones de oído (duermo con tapones de oído) pero escuché esa voz, fuerte y
clara, como si la mujer estuviera sentada cerca mío en la cama.
Ahora llevo la Eucaristía al
hospital. Tengo un conocimiento sobre estas personas; puedo decir que necesitan
escuchar. Esto no viene de mi. Creo que este es mi propósito restante.
Información previa:
Sexo:
Mujer
Fecha en que ocurrió la ECM:
Incierto, aproximadamente los años 1952-1953
¿En el momento de su experiencia, existía alguna circunstancia que
amenazara su vida?
Incierto Enfermedad Incierto, estaba enferma, no
recuerdo si esto pasó durante esta enfermedad o recobrándome de ella. Tuve
neumonía doble y posiblemente pericarditis ya que la conducción eléctrica de mi
corazón, aún benigna, no es normal. Estaba demasiado enferma como para que me
llevaran al hospital (en esa época) y estaba considerada como riesgo de muerte.
Elementos de la ECM:
¿Cómo considera el contenido de su experiencia?
Completamente placentero
¿Se sintió separado de su cuerpo?
Perdí la consciencia de mi cuerpo
¿Cómo compararía su máximo nivel de consciencia y alerta durante la
experiencia con su consciencia y alerta normal de todos los días?
Más Consciente y alerta de lo normal
No estaba en mi cuerpo; era puro ser; el ser con el que estaba era absoluta
pureza y amor; no quería dejarla, quería estar CON ella y hubiera elegido
libremente esto si mi madre no me hubiera despertado a la fuerza.
¿En qué momento de la experiencia estuvo en su máximo nivel de consciencia y
alerta?
Durante la “visión” o “sueño”.
¿Sus pensamientos estaban acelerados?
Increíblemente
¿El tiempo pareció acelerarse o ralentizarse?
El tiempo parecía ir más rápido o más lento que de costumbre. Me
dijo muchas cosas y debe haber sido un período muy breve pero pareció durar para
siempre.
¿Sus sentidos eran más intensos que de costumbre?
Increíblemente más intensos
Compare por favor su visión durante la experiencia con su visión
cotidiana que tenía inmediatamente antes del momento de la experiencia.
Imposible de explicar: no era “terrenal”, de esta Tierra. No era nada que
hubiera experimentado en esta vida, en mi cuerpo. El “brillo” de ella no era
brillante, era más brillante que el brillo pero no dañono, y era cálido pero no
físicamente cálido. Todo ese lugar era como un “guante” extraterrenal de marrón
suave y su brillo.
Compare por favor su audición durante la experiencia con su audición cotidiana
que tenía inmediatamente antes del momento de la experiencia.
No
era audición per se, era más como “saber” o “recibir” pero la mujer tenía una
voz; muy difícila de explicar.
¿Le pareció ser Consciente de cosas que ocurrían en otro lugar, como si
se tratase de percepción extra sensorial (ESP)?
Sí, y los hechos han sido comprobados
¿Pasó hacia o a través de un túnel?
No
¿Encontró o llegó a ser Consciente de algún ser difunto (o todavía vivo)?
No
¿Vio, o se sintió envuelto por, una luz brillante?
Una luz de claro origen místico o de otro
mundo
¿Vio una luz sobrenatural?
Si 'Ella' estaba EN una luz
extraterrenal o la irradiaba de algún modo.
¿Le pareció entrar a algún otro mundo sobrenatural?
Un reino claramente místico o
sobrenatural
¿Qué emociones sintió durante la experiencia?
Alegría,
éxtasis, amor y seguridad inmensa, aceptación, confort
¿Tuvo una sensación de alegría?
Increíble alegría
¿Sintió una sensación de armonía o unidad con el Universo?
Me sentía unido o uno con el mundo
¿Le pareció de repente entenderlo todo?
No
¿Volvieron a usted escenas de su pasado?
Mi pasado rápidamente pasó ante mí, fuera
de mi control
¿Vinieron a usted escenas del futuro?
Escenas de mi futuro personal
De mi futuro personal y creo que algo
sobre el mundo también; no estoy segura.
¿Alcanzó un límite o una estructura física limitante?
No
¿Llegó a una frontera o punto de no retorno?
No
Dios, espiritualidad y
religión:
¿Qué importancia le daba a su vida religiosa / espiritual antes de su
experiencia?
Incierto
¿Han cambiado sus prácticas religiosas desde su experiencia?
Incierto Tenía cinco años en ese momento. Desde
entonces he estudiado mucho sobre religiones, espiritualidad, lo paranormal,
filosofía, etc. Sin embargo, estoy tan segura de Dios como a los cinco años,
creo que aún más ya que Él me lo ha comprobado muchas veces.
¿Cuál es su religión ahora?
Cristiana- Católica He vuelto al catolicismo romano pero no acepto
muchas enseñanzas ya que he experimentado cosas en mi vida que sé que son reales
y que las contradicen.
¿Su experiencia incluyó características concordantes con sus creencias
terrenales?
Contenido que era concordante y no
concordante con las creencias que tenía en el momento de la experiencia
Era una niña pequeña. Mis “creencias”
eran lo que me habían enseñado. Nunca le dije a mi madre acerca de la “señora”,
lo que me dijo, hasta décadas después. Esta experiencia no fue acerca de mis
creencias, fue acerca de esta vida, esta vida específica, y lo que se esperaba
de mi.
¿Ha tenido un cambio en sus valores y creencias debido a su experiencia?
Incierto
Tenía CINCO años y una gran fe en Dios. Mi fe nunca disminuyó más que UNA VEZ y
esa es OTRA historia diferente. No tengo ninguna duda de que este mundo que
podemos ver, tocar, escuchar, oler, es de algún modo una ilusión y que hay otra
dimensión de existencia que ocurre simultánea a nuestra experiencia de vida la
cual puede, y lo HACE, afectarnos (la mayoría de la gente no es consciente de
esto por alguna razón). Acepté esta “visión” sin dudas, no me sorprendió, y era
algo normal.
¿Le pareció encontrar a un ser místico o una presencia, u oyó una voz no
identificable?
Me encontré con un ser definido, o una voz claramente
de origen místico o sobrenatural
¿Vio usted espíritus fallecidos o religiosos?
Los vi realmente
¿Se encontró o tomó consciencia de cualesquiera seres que vivieron
previamente en la Tierra y que son descritos por su nombre en las religiones
(como por ejemplo: Jesús, Muhammad.
Buddha, etc.)?
Si Crei que era la Madre Bendita. Todavía lo
creo.
¿Obtuvo durante su experiencia información sobre la existencia pre mortal?
Incierto
No recuerdo la mayor parte de lo que “ella” me dijo. El número 23 fue el
recuerdo primero y más fuerte; el siguiente recuerdo fue el “corazón roto” (y
esto fue recientemente). No recuerdo qué más “ella” me dijo pero sé que HABÍA
otras cosas.
¿Obtuvo durante su experiencia información sobre conexión universal o
unidad?
Si Tomé como algo real y casi ESPERADO el recibir esta
visita celestial, y todavía lo creo. Realmente SUPE que todo está conectado (no
me pregunten cómo). Tenía extremo cuidado de no lastimar ni siquiera a un
insecto. Me sentí reconfortada por la información recibida.
¿Obtuvo durante su experiencia información sobre la existencia de Dios?
Si
"Ella” me dijo que Dios nunca me dejaría sola durante este difícil viaje.
Realmente SUPE que Dios existe. Fue muy real para mi desde que era niña. Su
aparición en esta “visión” o lo que fuera no me sorprendió, quería quedarme con
ella, no quería recobrar la consciencia.
Con respecto a nuestras vidas terrenales aparte de la religión:
¿Obtuvo durante su experiencia conocimiento o información especial sobre
su finalidad?
Si
Supe que había un propósito especial pero este conocimiento me llegó
gradualmente así que creo que ES otra parte de la experiencia que SÍ recuerdo:
un propósito definido en esta vida después del cual sabré que lo llevé a cabo.
¿Obtuvo durante su experiencia información sobre el sentido de la vida?
Si Me dijeron mi propósito, y no recuerdo lo que se
dijo. Al ser mayor (adolescencia y mis veinte) SUPE que esta vida tenía un
propósito real, específico e importante y que lo sabría una vez que lo llevara a
cabo. Creo que el amor y cuidado incondicional que le di a mi hija
¿Cree en la vida después de la muerte después de su experiencia?
Incierto Si Esta
“mujer” no fue un sueño, estaba realmente allí y yo no estaba en mi “cuerpo”
sino con ella de algún modo. Me dijo sobre mi vida futura y CREO que algo acerca
del mundo. Me dijo que Dios nunca me abandonaría. Ya lo sabía, aún a esa edad.
¿Obtuvo información sobre cómo vivir nuestras vidas?
Incierto Estoy tratando de ser
completamente honesta y creo que he contestado todas las preguntas con la
información disponible hasta ahora.
¿Obtuvo durante su experiencia información sobre dificultades de la vida,
desafíos y adversidades?
Si
Como dije, me avisaron sobre mi futuro y no he tenido una vida fácil. Me dijeron
cuál era el propósito (¡pero no puedo recordarlo!) y que Dios no me dejaría sola
para afrontarlo, que Él estaría siempre conmigo y así ha ocurrido.
¿Obtuvo durante su experiencia información sobre el amor?
Incierto Ya que la esencia de este “ser”
era el AMOR incondicional creo que comprendí que el AMOR incondicional era algo
que necesitaría aprender y USAR en esta vida, y lo he hecho.
¿Qué cambios de vida ocurrieron en su vida después de la experiencia?
Recuerden que tenía CINCO años de edad pero NO era una niña “promedio” de 5
años. No le tenía miedo a la muerte (aún cuando estaba muy enferma); tenía miedo
de algunas cosas y ese miedo cambió, al crecer y aprender. Ahora no tengo miedo.
He vivido con el recuerdo de esta visión toda mi vida (tengo casi 65) y me ha
afectado demasiadas veces como para recordarlas, y aún me afecta hoy.
¿Han cambiado sus relaciones específicamente debido a su experiencia?
Si
He pasado mi vida siendo muy cuidadosa de la forma en que le hablo a los demás,
ya que las palabras son COSAS. Nunca insulto, nunca humillo, y sigo siendo muy
consciente de los sentimientos ajenos: hipersensible a ellos. Siempre traté de
ayudar a los más débiles y he ayudado a la gente porque es LO QUE HAY QUE HACER,
no es una opción. Fui así desde ANTES de la visión pero al ser tan JOVEN en ese
momento es difícil saber si me volví más sensible debido a ella.
Después de la ECM:
¿Fue la experiencia difícil de expresar con palabras? Si
En ese momento, imposible. Pero la recuerdo claramente.
¿Con qué precisión recuerda la experiencia en comparación con otros
acontecimientos de la vida que ocurrieron en la época de la experiencia?
Recuerdo la experiencia con más precisión
que otros acontecimientos de la vida que ocurrieron en la época de la
experiencia
¿Ha tenido tras la experiencia dones psíquicos, no ordinarios u otros
dones especiales que no tuviera antes de la experiencia?
Si Creo que era psíquica ANTES de la
experiencia. Podía comunicarme fácilmente con los adultos pero recuerden que
solo tenía CINCO años. Ahora soy DEFINITIVAMENTE psíquica y creo que lo he sido
toda mi vida. A veces sé cosas antes de que pasen o sé qué va a hacer o decir
una persona días, incluso semanas, antes de que lo hagan. Deja vu es común en
mi, lo doy por sentado. Tengo premoniciones, etc. y las tuve de niña. Una vez,
justo después de la visión me perdí en el pueblo paterno en Pennsylvania y
“alguien” me dijo cómo volver a casa. No escucho VOCES; “escucho” voces, difícil
de explicar. No soy psicótica; solo diferente. He sido “psíquica” toda mi vida.
Solía recibir consultas de la gente y obtenía sus nombres y datos sobre sus
vidas; una vez, contacté al hermano de una persona que había muerto en la guerra
de Vietnam. Lo vi a él y a sus amigos, en sus uniformes, y estaban riendo; uno
de ellos dijo: “dile que no se preocupe por el reloj”. La persona que me
consultó dijo que nunca habían podido encontrar el reloj de su hermano cuando
había muerto. Durante esta experiencia, mi tía Di, ya fallecida, que era más una
madre para mi que mi propia madre, me DETUVO. Comprendí que no podía contactar a
los que habían muerto. Mis habilidades servían para otra cosa. Para lo que estoy
haciendo ahora y he hecho durante los últimos 25 años.
¿Hay una o más partes de la experiencia que son especialmente
significativas o importantes para usted?
Sin esa visión no habría podido sobrevivir espiritualmente
intacta, algo que es muy importante para mi; mi integridad espiritual. Llegué al
Mundo con ella, es algo que me gané de algún modo o me dieron, y espero dejar el
Mundo habiéndola mejorado. Esta visión me dijo CÓMO hacerlo.
¿Ha compartido usted alguna vez esta experiencia con otros?
Si
Recuerdo haberle contado a mi madre cuando estaba en mis 40’. La única otra
persona a quien DEFINITIVAMENTE se lo conté es a un psiquiatra jesuita que
conocí durante la “crisis” espiritual a la que aludí previamente. Desde ese
momento lo he compartido con algunas personas. Una en particular es mi
psicoterapeuta que dijo que conocerme cambió su vida! Otra más reciente es una
mujer que me preguntó si alguna vez hablé de esto con un sacerdote. No me
importa lo que piensen, en realidad.
¿Tenía usted algún conocimiento de las experiencias cercanas a la muerte
(ECM) antes de la experiencia?
No
¿Qué pensó sobre la realidad de su experiencia poco tiempo después (días
o semanas) de que sucediera?
La experiencia fue definitivamente real
¿Qué piensa ahora sobre la realidad de su experiencia?
La experiencia fue definitivamente real
¿En cualquier momento de su vida, ha habido alguna vez algo que le haya
reproducido parte de la experiencia?
Si Mi última visión, de la que hablé antes, donde me
dijeron que estaría aquí pero no todavía, que necesitaban de mi, y luego escuché
mi nombre en mi oído izquierdo. ESO fue absolutamente similar y NO fue un sueño,
nada como esos dos eventos me han ocurrido.
¿Hay algo más que le gustaría añadir acerca de su experiencia?
No le cuento a la gente mis “historias” de encuentros con Dios y sus criaturas
porque no creo que la mayoría merezcan escucharlas, no las recibirían bien, tal
vez piensen que estoy desequilibrada o tengo algún tipo de psicosis. He contado
muchas de mis historias a algunas personas. Decidí compartir esto con ustedes
porque NO tengo idea de qué se trata pero tengo una sensación de “expectación”:
algo está llegando, no sé qué es, pero está aquí definitivamente, en un futuro
muy cercano.
Creo (porque no puedo recordar todo lo que me dijeron) que yo (y todos los
demás) estoy aquí para aprender Y para enseñar pero mayormente para DAR. Estoy
tratado de obtener el “mensaje” completo; creo que es importante conocerlo pero
no parece estar en mi control. Creo que si debo recordarlo, lo haré.
También me dijeron que Dios nunca me abandonaría.
¿Hay alguna otra pregunta que podríamos hacer para ayudarle a comunicar
su experiencia?
No se me ocurre ninguna.