Descripción de la experiencia:

Me acosté en mi cama, estaba muy triste desde hacía varios meses, muy débil, comía poco y dormía poco, mi marido había dejado el hogar y yo pensaba que ya no me quedaba nada que hacer en la tierra, mis hijos podrían vivir con su padre y su nueva consorte, no había nada que me retuviera, decidí dejar esta vida sin remordimiento, sin mirar hacia atrás, no tomé nada, ni bebida, ni medicamento, solo la voluntad de irme me guiaba. Cerré los ojos, estaba en la oscuridad como en un tren, luego súbitamente como si el tren se hubiese puesto en movimiento, crucé rayos de luz, cada vez más y más acelerados, esto duró bastante tiempo, entonces me pregunté si podría volver atrás, intenté levantar mi dedo meñique, nada que hacer, era una etapa, opté por continuar, el tren desapareció en el decorado, había solamente una suave luz, yo flotaba, como un inmenso mar, sentí el agua, la arena, el sol, como si estuviera en la orilla de una playa, solo las sensaciones, calor, humedad, luz, muy agradable. Allí estaba mi prima, mis abuelos y muchos otros pensamientos de personas fallecidas. Me dijeron: “Estás donde deseabas estar, te estábamos esperando”.

Era magníficamente bueno.

Luego, a lo lejos, muy a lo lejos, oí una voz, muy lejana, no quería oírla, quería ignorarla, pero persistía, reconocí la voz de mi hijo, primero como un zumbido luego más clara, luego finalmente repetía: “Mamá agárrate a la vida, tú sabes cuánto te gusta la vida”, me repitió esto varias veces. Yo pensaba en mi cabeza: “No, déjame donde estoy”. Luego, como si no lo hubiese terminado todo antes de irme, como si hubiese olvidado un precioso equipaje antes de tomar el avión, tomé la decisión de volver.

Mi hijo se había despertado en medio de la noche, entró en mi habitación, pensó que yo dormía y me dijo estas palabras.

Luego, lo pasé muy mal al volver a mi cuerpo, salía poco, aquello me hacía sufrir, porque oía lo que la gente pensaba y sentía su sufrimiento, eso me hacía daño por doquier. Yo no temía a nada, ni a nadie, no había ningún límite para nada, a lo que yo podría lograr, empecé a entrenarme para volver a mi cuerpo poco a poco.

Yo trabajaba en casa y mi hijo velaba por mí, me había salvado la vida, luego un amigo entró en mi vida devolviéndome el gusto por la vida, un alma gemela. Después he desarrollado bastante intuición, la vida ha cobrado otro sentido, vivo la vida y cuido mi cuerpo como si fuera a vivir hasta muy vieja.

Varias personas me han dicho que he cambiado mucho para bien.

Ésta es mi historia.

¿Alguna medicación asociada o sustancias que pudieran afectar la experiencia? No.

¿Fue el tipo de experiencia difícil de expresar con palabras? Sí. Al hablar con otra persona que no lo ha vivido.

¿En el momento de la experiencia, había allí algún suceso que pusiera en peligro su vida? No.

¿Cuál era su nivel de consciencia y de vigilancia durante la experiencia? Muy consciente.

¿Era la experiencia de algún modo parecida a un sueño? No, era real.

¿Experimentó una separación entre su consciencia y su cuerpo? Sí.

Describa su forma o apariencia cuando estaba fuera de su cuerpo: yo era luz y energía.

¿Qué emociones sintió durante la experiencia? Era muy feliz, un gran bienestar, sin miedo.

¿Oyó usted algún sonido extraño o ruidos? No. Nada aparte de la voz de mi hijo.

¿Pasó usted en o por un túnel o espacio cerrado? Sí. Un tren sobre una vía férrea que atraviesa rayos de luz, cada vez más rápidamente y los tabiques del tren desaparecen poco a poco, estoy en el infinito, no hay más horizonte.

¿Vio usted una luz? Sí, suave.

¿Encontró usted o vio a algún otro ser? Sí. Mi prima, mis abuelos y otros: “Has llegado a donde deseabas, te esperábamos".

¿Experimentó usted una revisión de acontecimientos pasados de su vida? No.

¿Observó usted u oyó durante su experiencia algo relacionado con personas o acontecimientos que pudiera ser verificado más tarde? No.

¿Vio usted o visitó dimensiones, niveles o lugares hermosos o de alguna otra manera peculiares? Sí. Ver texto.

¿Tuvo alguna sensación de alteración del tiempo o el espacio? Sí. Ver texto.

¿Tuvo usted la sensación de tener acceso a una sabiduría especial, a un orden y / o propósito universal? Sí. Sé que he vuelto por mis hijos.

¿Alcanzó usted un límite o una estructura física de delimitación? Sí. Cuando llegué a un sitio que era el infinito por todos lados.

¿Tuvo usted consciencia de acontecimientos futuros? Sí. En la vida cotidiana, con bastante frecuencia sé cosas que van a pasar y eso ocurre.

¿Se implicó en, o fue consciente de, una decisión de vuelta al cuerpo? Sí. Sabía que sería duro volver y lo pasé mal.

¿Como resultado de su experiencia, ha recibido usted dones psíquicos, paranormales u otros dones especiales que no tuviera antes de la misma? Sí. Más intuición, y con cierta persona hablo con el pensamiento.

¿Tuvo usted tras su experiencia algún cambio de actitudes o creencias? Sí. Amo la vida, vivo el día a día, no le temo a la muerte.

¿Ha afectado la experiencia a sus relaciones? ¿Vida diaria? ¿Prácticas religiosas etc.? ¿Opciones de carrera? Mis prioridades han cambiado, tengo mejores relaciones con mi entorno y con las personas con las que entro en contacto.

¿Ha compartido usted esta experiencia con otros? Sí. La han encontrado hermosa.

¿Qué emociones experimentó usted después de su experiencia? Creo en la reencarnación y los pensamientos hacia las personas deben ser sobre todo pensamientos de amor.

¿Cuál fue la mejor y la peor parte de su experiencia? Lo que vi y sentí me da confianza en la vida después de la muerte.

Encuentro que hay mucho sufrimiento cuando se vive en la tierra. Cuando volví a mi cuerpo, aquello me hacía daño.

¿Ha cambiado su vida expresamente como consecuencia de su experiencia? Sí. Soy más feliz, sé que todos formamos parte de un todo, tengo que hacer mi parte para que el todo sea también feliz.

¿Tras su experiencia, tuvo usted algún otro acontecimiento en su vida, medicamentos o sustancias que reprodujeran alguna parte de la experiencia? Sí. A veces, cuando estoy con personas especiales que están llenas de energía, por ejemplo mi alma gemela, siento una sensación que podría parecerse un poco a lo que sentí.

¿Las preguntas planteadas y la información que acaba usted de proporcionar describen exacta y exhaustivamente su experiencia? Estas son solo palabras, lo que viví es una sensación, una emoción es diferente.