ECM de
Leonard
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Descripción de la experiencia:
Sentí que salía de mi cuerpo. Una vez fuera, vi al
personal hospitalario afanarse en torno a mi cuerpo para
reanimarlo. ¡Estaba asombrado de los poderes sobrenaturales que
tenía en esta otra forma! ¡Para empezar mi visión era de 360º,
podía ver hacia arriba, hacia abajo, a derecha, a izquierda,
hacia atrás, veía HACIA TODOS LADOS a la vez!
En segundo lugar, podía hacer zum sobre un punto preciso.
¡También viajaba a la velocidad de mi pensamiento, bastaba que
pensara en un lugar o en una persona para encontrarme allí!
¡Podía atravesar los muros, pasaba a través de la materia y era
MUY EXCITANTE!
Oía a la gente pensar. ¡Incluso antes que abrieran la
boca, sabía lo que iban a decir! ¡Porque oía sus pensamientos!
De hecho, había bastante cacofonía en la sala pero bastaba que
me concentrara en una persona para no oírla más que a ella!
¡Bueno, eso en cuanto a los poderes extraordinarios que se
tienen fuera de nuestro cuerpo! ¡Me paseé, fui a ver a mi madre
a su casa, me fui a las profundidades del Universo, subí muy
alto en el espacio y el espectáculo era MAGNÍFICO! ¡En un
momento dado me sentí aspirado y llegué a un largo túnel negro,
era aspirado a una velocidad increíble! Al final del túnel había
un punto luminoso. ¡En el túnel había otros seres como yo y nos
miramos diciéndonos: “¡Creo que estamos muertos!”. Cuanto más
avanzaba más grande se hacía la luz. ¡Llegué a esta luz que era
maravillosa, muy brillante, pero lo que más me chocó es que en
esta luz me sentía en paz, me sentía alegre pero sobre todo
sentía un amor increíble! ¡Esta luz me amaba! ¡Esta luz me
habló! ¡Le pregunté si era Dios y me respondió: “Sí, yo soy la
luz! ¡Este ser de luz (que no vi) lo sabía TODO de mí, conocía
mi vida de la A a la Z! Una vez en esta luz me acordé de quién
era, también obtuve respuestas a todas las preguntas que alguna
vez me planteé, como quién y cómo creó el Universo, cómo
funciona el Cosmos, la Física, etc. ¡Oh sí, yo no aprendía nada,
yo recordaba!
Estar en este conocimiento era un estado divino. Dios me
mostró entonces toda mi vida desde mi nacimiento hasta mi ECM.
Sentí y reviví todos
estos acontecimientos y también sentí las emociones que les
había provocado a los demás. ¡Yo era mi único juez! Esta
experiencia fue muy penosa. Ni siquiera me atrevo a imaginar lo
que Adolfo Hitler debió de sufrir sintiendo los dolores de
millones de personas... Lo que Dios me mostró fue cuando había actuado de buen
corazón sin pensármelo antes y cuando había actuado sin amor.
Incluso me vi robando bombones de una tienda diciéndome:”¡Uf,
nadie me ha visto!”. Pero en realidad alguien me había visto...
¡Sí, Dios me había visto! Pero él no me juzgó. Esto es también
lo que más me chocó, el hecho de que Dios no juzga, lo único
que hace es amarnos con un amor incondicional, este amor es
indescriptible, no es como lo que sentimos en la Tierra sino más
bien un amor-fuerza.
La luz y yo
hablamos durante bastante tiempo, ¡ah sí!, en el otro mundo la
comunicación se hace por telepatía (transferencia de
pensamiento). ¡He de deciros que Dios tiene un sentido del humor
fantástico, nunca me he reído más en mi vida! Nos reímos de la
manera tan seria con la que había reaccionado a un
acontecimiento. ¡La vida en la Tierra es una gran obra de
teatro! ¡No hay que tomársela muy en serio! En cuanto al
conocimiento universal que obtuve no me dejaron que volviera con
las respuestas, recuerdo que sabía y también recuerdo algunas
pequeñas cosas como el hecho de que ¡somos seres eternos,
siempre hemos existido y siempre existiremos! Somos Dios-hombre
venidos a la Tierra para crear en la materia. En cada
encarnación perdemos la memoria de quiénes somos. ¡Antes de la
creación del Universo solo estábamos nosotros reunidos en un
solo pequeño punto de consciencia, esta consciencia poseía el
conocimiento pero no podíamos hacer la experiencia por lo que
nos dividimos en miles de millones de consciencias individuales
y creamos el Universo para venir a divertirnos a él! ¡Un día nos
reuniremos todos de nuevo y otra vez “explotaremos” y todo
volverá a empezar, es un círculo sin fin!. La verdadera vida, la
verdadera realidad, se halla en el otro mundo. ¡Ah sí! Recuerdo
que la luz me dijo que hay más de un Universo, de hecho hay
miles de millones, y la Tierra no es el único planeta donde
podemos elegir venir a encarnarnos. Recuerdo que cuando estaba
fuera de mi cuerpo me dije: “¿Si no tengo un cuerpo qué aspecto
tengo entonces?” ¡Entonces me miré y yo mismo era una luz,
estaba hecho de luz! ¡Pero también en un momento dado ya no
tenía este cuerpo de luz, solo era un punto de consciencia en el
Universo! En un momento determinado Dios me dijo que debía
regresar a la Tierra y ahí rehusé, no era cuestión de que
volviera a ese cuerpo enfermo. Y ahí Dios me mostró una visión
de mi madre que lloraba porque yo estaba muerto, entonces
regresé. Volví a bajar el famoso túnel y me reintegré a mi
cuerpo por la cabeza. La sensación era muy desagradable, era
como ponerse un traje de buzo demasiado pequeño. ¡Eso es todo!
¡Esa fue mi ECM!
Descripción de la experiencia:
¿Fue la experiencia difícil de expresar con palabras?
Sí. No hay palabras para describir las intensas emociones que viví pero tampoco
los colores que vi, etc.
¿Tenía alguna sensación de alteración del espacio o del tiempo?
Sí. ¡Tiempo y
espacio estaban abolidos!¿Tenía la sensación de comprender un
conocimiento especial, orden universal y/o propósito?
Sí. ¡Somos seres
eternos! No hemos sido “creados” pues siempre hemos existido, sin principio y
sin fin! Somos Dios experimentando quiénes somos a través de la materia. La vida
es un ciclo sin fin. ¡Un día nos reuniremos otra vez y de nuevo vamos a
“explotar” y todo recomenzará! ¡Todo lo que se pueda imaginar puede existir pues
esto proviene de la consciencia universal (conocimiento), el pensamiento es
creador! Aquí las cosas se producen con retraso pero al otro lado se producen
instantáneamente. Dios (nosotros) es una vibración de amor y esta vibración crea
luz. ¡Cuanto más amamos más luz emitimos porque vibramos más rápido!
¿Alcanzó un límite o una estructura física de delimitación?
No.
¿Llegó a ser consciente de acontecimientos futuros?
No.
¿Tuvo algún don psíquico, paranormal u otros dones especiales tras la
experiencia que no tuviese antes?
Sí. Tengo más intuición y he tenido visiones
de futuro que han demostrado ser exactas.
¿Ha compartido esta experiencia con otros?
Sí. ¡La conté en
los días que siguieron y su reacción fue positiva aunque no parecieron creerme
demasiado!
¿Tenía usted algún conocimiento de experiencias cercanas a la muerte (ECM)
previamente a su experiencia?
Sí. Había leído el libro del Dr. Moody y como sabía que la vida continúa no me
sorprendió lo que pasó y cuando vi la luz me dije: ”¡Oh es la luz de la que
habla la gente!”.
¿Cómo vio la realidad de su experiencia poco tiempo (días a semanas) después de
que sucediera?
La experiencia fue muy real. Esto es lo que respondo: ¿En ese momento estabas
soñando? No. ¿Pero cómo lo sabes? Bueno, a mí me da igual. ¡No solo era real
sino que nunca me he sentido tan vivo como en esta experiencia!
¿Hubo una o varias partes de la experiencia especialmente significativas o
críticas para usted?
Sí. ¡Mi conversación con Dios!
¿Cómo ve actualmente la realidad de su experiencia?
La experiencia fue muy real.
¿Han cambiado sus relaciones específicamente como resultado de su experiencia?
Sí. ¡Ahora intento
poner amor en todo lo que emprendo y soy consciente de que mis pensamientos
crean mi vida!
¿Han cambiado sus creencias/prácticas religiosas específicamente como
consecuencia de su experiencia?
No. No tengo práctica religiosa.
¿Tras la experiencia, ha tenido otros eventos en su vida, medicamentos o
sustancias que hayan reproducido alguna parte de la experiencia?
No.
¿Las preguntas planteadas y la información que ha proporcionado describen de
forma precisa y exhaustiva su experiencia? Sí.
Sentí que me estaba saliendo del cuerpo. Una vez
fuera, vi al personal del hospital trabajando en mi cuerpo para revivirlo.
¡Estaba sorprendido de los poderes paranormales que tenía en esta forma
diferente! Primero, tenía 360 grados de visión periférica, podía ver arriba,
abajo, a mi derecha, a mi izquierda, hacia atrás… ¡Podía ver HACIA TODOS LADOS
al mismo tiempo!
Segundo, podía acercar la visión en cualquier punto
en particular. También viajé a la velocidad del pensamiento, simplemente
necesitaba pensar en un lugar o en alguien, y estaba instantáneamente allí.
Podía ir a través de paredes, a través de cualquier material, ¡y era
verdaderamente MUY EXCITANTE!
Escuché el pensamiento de la gente. Incluso antes de
que abrieran la boca. ¡Sabía lo que ellos iban a decir! ¡Porque podía oír sus
pensamientos! Además, había en la sala una mezcla de gente hablando al mismo
tiempo, pero solamente necesitaba enfocarme en una persona, y entonces
¡solamente la escuchaba a ella! Bueno, ¡ésos son los extraordinarios poderes que
uno tiene cuando está fuera del cuerpo! Empecé a pasear, visité a mi madre en su
casa, fui profundamente dentro del universo, subí muy alto en el espacio y… ¡la
vista fue MARAVILLOSA!
En cierto momento fui absorbido a increíble velocidad
y fui a dar en un profundo túnel oscuro. Al final del túnel había un punto de
luz brillante. Dentro del túnel había otros seres como yo mismo, y nos mirábamos
los unos a los otros, diciendo, “¡parece que estamos muertos!” A medida que
avanzaba, la luz iba creciendo. Llegué a la luz que era maravillosa, muy
brillante, pero lo que me impactó más fue que en esta luz me sentí en paz, en
alegría, ¡pero más que nada, sentí un amor increíble!
Esta luz ¡me amaba! Esta luz ¡me habló! Le pregunté
si ella era dios y me contestó, “Sí, ¡Yo soy la luz! Este ser de luz, (a quien
no pude ver) ¡sabía TODO sobre mí, conocía mi vida desde el principio al fin!
Estando en la luz, recordé quien yo era, y recibí las respuestas a todas las
preguntas que yo tuve alguna vez, como quien creó el universo y cómo, cómo
trabaja el cosmos, la física, etc. Oh sí… No lo aprendí, simplemente lo recordé!
Estar en ese conocimiento fue un estado divino. Dios
entonces me mostró toda mi vida desde el nacimiento hasta esta experiencia ECM.
Yo sentí y experimenté otra vez todos esos eventos y además sentí las emociones
que yo había producido en las otras personas. ¡Yo fui mi único juez! Esta parte
de la experiencia fue muy dolorosa. Me imagino lo que habrá pasado Adolf Hitler
sintiendo el dolor de millones de individuos… Dios me mostró cuándo yo hice
cosas con generosidad sin haberlas premeditado, y cuándo había hecho cosas sin
amor.
Incluso me vi robando caramelos en un negocio,
pensando para mí, “Guau, ¡nadie me vio! Pero en realidad, alguien me vio… Sí,
¡Dios me vio! Pero no me juzgó. En realidad, eso fue lo que más me impactó. Dios
no juzga, Él solamente nos ama con amor incondicional, un amor indescriptible,
que no es como lo que sentimos en la tierra.
La luz y yo hablamos por largo rato. ¡Oh sí! En el
otro lado la comunicación se hace por telepatía, como transferencia de
pensamientos. Debo decirles que Dios tiene un fantástico sentido del humor. ¡Nunca me reí tanto en toda mi vida! Nos reímos por la manera tan seria en
que reaccioné en cierto evento. ¡La vida en la tierra es un enorme drama! O
deberíamos tomarla tan en serio! Sobre el conocimiento universal que adquirí, no
se me permitió volver con las respuestas. Recuerdo algunas pequeñas cosas como
el hecho de que somos seres eternos, ¡siempre hemos existido y siempre
existiremos! Somos hombres-dioses que venimos a la tierra a crear en la materia
física. Cada vez que encarnamos, perdemos memoria de quienes somos.
Antes de la creación del universo solamente estábamos
nosotros, unidos en un solo punto de consciencia. Esta consciencia tenía
conocimiento, pero no podíamos experimentarlo. Entonces nos separamos en
billones de consciencias individuales y ¡creamos el universo para divertirnos!
Un día estaremos reunidos otra vez, y otra vez “explotaremos” y todo comenzará
de nuevo, en una repetición interminable. La verdadera vida, la verdadera
realidad está en el otro mundo. ¡Oh sí! Recuerdo que la Luz me dijo que hay más
de un universo, en realidad hay billones de ellos y que la tierra no es el único
planeta sobre el que podemos elegir encarnar.
Recuerdo que cuando estaba fuera de mi cuerpo, yo
pensaba cómo luciría sin tener un cuerpo. Entonces pude mirarme y yo era de luz,
¡estaba hecho de luz! Sin embargo, en cierto momento ya no tenía este cuerpo de
luz, y yo era simplemente ¡un punto de consciencia en el universo!
Entonces Dios me dijo, “Debes volver a la Tierra.” Yo
me negué, “No volveré a ese cuerpo enfermo”. Entonces Dios me mostró una visión
de mi madre llorando mi muerte, y decidí volver. Bajé por el túnel del que se ha
hablado tanto, y tuve que volver al cuerpo a través de la cabeza. La sensación
fue desagradable. Era como ponerse un traje de bucear demasiado chico. ¡Aquí
está! ¡Esta fue mi ECM!
DESPUÉS DE LA DESCRIPCIÓN, UN CUESTIONARIO DE
PREGUNTAS ACLARATORIAS:
¿Fue la experiencia difícil de expresar en palabras?
Sí.
No hay palabras para describir las intensas emociones que experimenté,
incluso para los colores que vi.
Al momento de la experiencia ¿había algún peligro de
vida?
Sí.
Tuve un ataque al corazón.
¿En qué momento durante la experiencia estaba usted
en su mayor nivel de consciencia?
¡En el otro
lado, la realidad es mucho más real que en nuestro cuerpo! ¡Estuve muy
consciente durante toda la experiencia!
¿Cómo su nivel más alto de consciencia durante la
experiencia se compara con su nivel
normal de todos los días?
Más consciente y alerta de lo normal.
Si su más alto nivel de consciencia durante la
experiencia fue diferente de su nivel de todos los días, por favor explique:
¡En el otro
lado la realidad es más real que estando en nuestro cuerpo! Yo estuve muy
consciente durante toda la experiencia.
¿Difería su visión de alguna manera de su visión
normal diaria?
Sí, en el otro
lado veía alrededor a 360 grados. Veía hacia todos lados al mismo tiempo.
¿Difería su oído de alguna manera de su audición
normal diaria?
Sí, en el otro
lado escuchaba a la gente pensar.
¿Experimentó la separación de su consciencia de su
cuerpo?
Sí.
¿Qué emociones sintió durante la experiencia?
¡¡ENORME
ALEGRÍA, PAZ Y AMOR!!
¿Pasó a través de un túnel?
Sí, un largo
túnel negro donde vi otras entidades que viajaban igual que yo.
¿Vio usted una luz?
Sí, ¡y hablé
con la luz! Esa luz era Dios pero nosotros no estamos separados de esa luz,
nosotros somos parte de ella, ¡nosotros somos Dios!
¿Encontró o vio a otros seres?
Sí, vi a
familiares fallecidos…
¿Experimentó una revisión de eventos pasados en su
vida?
Sí,
Me di cuenta que en realidad siempre
tenemos que hacer las cosas con amor. ¡Sea lo que sea, uno debe hacerlo con
amor!!!
¿Observó u oyó algo durante su experiencia, relativo
a gente o eventos que pudiera ser verificado más tarde?
Sí,
¡Yo hablé con mi madre quien confirmó que ella vestía las ropas que yo vi
y que dijo las cosas que yo escuché!
¿Vio o visitó algún hermoso lugar o dimensión?
Sí, estaba en
un “ambiente” hecho de luz. Con una serie de colores que no se encuentran aquí,
en la tierra.
¿Tuvo alguna sensación de espacio o tiempo alterados?
Sí,
tiempo y espacio no existen.
¿Le quedó alguna sensación de conocer algún
conocimiento o propósito?
Sí,
¡nosotros somos seres eternos! No hemos sido creados, porque hemos
existido siempre, ¡sin principio ni fin! Nosotros somos Dios experimentando
quienes somos a través de la materia. La vida es un círculo interminable. Un día
estaremos reunidos otra vez, y otra vez “explotaremos” ¡y comenzaremos de vuelta
todo de nuevo! Todo lo que puede ser imaginado puede existir porque todo se
origina en la consciencia universal (conocimiento), ¡el pensamiento es creativo!
Aquí las cosas ocurren con una demora, pero en el otro lado suceden
instantáneamente. Dios (nosotros) es vibración, amor, y esta vibración crea luz.
Cuanto más amamos, más luz emitimos, ¡porque vibramos más rápido!
¿Llegó a una frontera o estructura física limitante?
No.
¿Se volvió consciente de eventos futuros?
No.
Después de la experiencia, ¿le quedó algún don
síquico o paranormal que no tenía?
Sí,
soy más intuitivo y tengo visiones del futuro que probaron ser
verdaderas.
¿Ha compartido su experiencia con otros?
Sí,
la conté en los días que siguieron y la reacción fue positiva, ¡a pesar
que ellos parecían no creerlo mucho!
¿Tenía algún conocimiento de experiencias cercanas a
la muerte (NDE) antes de la experiencia?
Sí,
había leído el libro del Dr. Moody, y sí, a causa de que sabía que la
vida continuaba, no tuve tanta sorpresa por lo que me pasó. Yo me dije, “Ah,
¡esta es la luz de la que habla la gente!”
¿Cómo vio la realidad de la experiencia a los pocos
días de ocurrida?
La experiencia
fue definitivamente real. Esta es mi respuesta, En este momento, ¿está usted
soñando? No, pero ¿cómo lo sabe? Bueno, esto es lo mismo para mí. No solamente
fue real, ¡sino que jamás me sentí tan vivo y despierto como durante esa
experiencia!
¿Hubo una o varias partes de la experiencia
especialmente significativa para usted?
Sí,
¡Mi conversación con Dios!
¿Cómo considera en estos momentos la realidad de
aquella experiencia?
La experiencia
fue definitivamente real.
¿Cambiaron sus relaciones como resultado de su
experiencia?
Sí,
ahora trato de poner amor en todo lo que hago y estoy consciente de que
mis pensamientos crean mi vida.
¿Cambiaron sus creencias religiosas como resultado?
No.
No practico ninguna religión.
Después de la experiencia, ¿ha habido algún otro
evento en su vida que reprodujo alguna parte de la experiencia?
No.
Las preguntas y la información que provee ¿describen
adecuadamente su experiencia?
Sí.