Descripción de la experiencia:

El 24 de mayo del 2005 comenzó como cualquier otro día. Cerca de las 10:30 am el hijo de mi vecino, Mike, se apareció en un auto. ¡Estaba tan emocionado! Quería que yo lo acompañara a dar una vuelta para mostrármelo. Mike, de 18 años y su novia Ashley de 17 se sentaron en los asientos delanteros. Yo me senté detrás de Mike, que estaba manejando. Me puse el cinturón de seguridad, y el auto pasó sobre una superficie áspera en la calle. Escuché algo así como un sonido metálico y Mike dijo inmediatamente: “¿qué demonios fue eso?”. “No lo sé, pero yo también lo escuché”, dije. Con pánico en la voz, Mike dijo: “algo raro le pasa al volante”. Se escuchó otro sonido similar al primero y Mike comenzó a gritar cada vez con más pánico: “no hay dirección, no hay dirección; ¿qué hago?” Me recosté hacia adelante, puse mis manos suavemente en sus hombros y con la voz más calmada que pude le dije: “no frenes y no aceleres, solo sigue hasta que pare”. “¿Y qué pasa con los autos detrás nuestro?”, preguntó gritando con pánico. “Tendrás que parar también”, le dije, tratando de sonar, y permanecer, calmada.

¡Chocamos un jeep de frente! Los sonidos del metal golpeando y los vidrios rompiéndose me rodearon mientras volaba hacia adelante y luego me detuve abruptamente debido al cinturón de seguridad y golpeaba contra el asiento. El impacto me quitó la respiración. Al mirar hacia mis pies, me examiné rápidamente. Inhalé y exhalé, sintiendo cada parte de mi cuerpo. “Uau, eso dolió pero estoy bien”, pensé cuando, de repente, hubo otro impacto, esta vez en la parte del conductor del auto. Fui lanzada hacia adelante como la primera vez contra el cinturón de seguridad que se había aflojado después del primer golpe y choqué contra el apoyacabeza frente a mi. Al golpear el pecho contra el apoyacabeza, sentí y escuché romperse mis huesos.

Cuando volví en mi, me di cuenta que la cadera izquierda estaba atrapada entre el asiento y la puerta del auto. Ashley estaba ya fuera del auto y Mike estaba tirado hacia adelante en el asiento del conductor con su cabeza contra el volante. Mientras giraba lentamente para tratar de sacarme el cinturón de seguridad, sentí un cambio doloroso en mi pecho. Casi me desmayé del dolor y entonces me di cuenta que no podía respirar. Pude soltarme el cinturón y sacar la cadera de donde estaba atrapada. Traté de abrir la puerta pero estaba atorada. Mientras iba hacia la otra puerta, Ashley la abrió. “¡Mike está atorado!, ¿puedes ayudarlo a salir? Yo no puedo”, dijo, mientras levantaba el brazo que estaba doblado en un ángulo extraño con un hueso saliendo de él. Al girar para tratar de ayudar a Mike, me desmayé por el dolor. Volví en mi, pero todavía no podía respirar. De algún modo logré salir del asiento trasero pero me desmayé en el suelo cerca de la rueda trasera, nuevamente.

“Cariño, cariño, necesitamos moverte. Los autos están tratando de pasar y no pueden verte tirada allí. Me temo que van a chocar el auto y te pueden matar. ¿Puedes moverte?. Hola, ¿puedes escucharme?”. Sentí una mano en mi hombreo y pude escuchar a alguien hablar a lo lejos. Pero, ¿quién era? Finalmente abrí los ojos y vi un rostro de mujer que me hablaba. Sonaba tan lejana. Con su ayuda, pude sostener mi pecho con una mano y gatear sobre mi otro codo y rodilla sobre la calle. Al acercarme a la vereda, me di cuenta que me iba a desmayar nuevamente. Supe que no iba a poder sostenerme y que mi cara golpearía el piso así que me acerqué a unas plantas, esperando que amortiguaran el impacto.

Sali de la oscuridad cuando Mike estaba gritando: “¡ayúdenme!¡no puedo salir! ¡no quiero morir! ¿dónde está mi mamá?” Mi instinto maternal me hizo querer ayudarlo. Cuando traté de moverme, me desmayé de nuevo por el dolor. En algún punto estaba totalmente consciente y parecía que estaba recostada sobre un charco de agua templada. “Espero no haberme orinado encima”, pensé. La mujer que me había ayudado estaba arrodillada a mi lado. Le toqué el brazo para que me preste atención y le susurré, señalando a mi estómago: “¿estoy sangrando?”. Me ayudó a levantarme la blusa y desabrocharme los pantalones y dijo: “no, no estás sangrando”. En ese momento supe que tenía heridas internas. Podía sentir hincharse mi estómago y el charco se hacía cada vez más grande y se extendía sobre mi estómago. Al tratar de respirar, me desmayé de nuevo.

Un torrente de pensamientos fragmentados es todo el recuerdo que tengo de los siguientes días. Estoy luchando para encontrar un sentido a todo esto. Escuchaba a Mike pedir ayuda. Quería ayudarlo así que trataba de moverme. Luego todo se hacía negro de nuevo. Ni un sonido, ni un pensamiento, solo la oscuridad. Pensé en mi mamá y en lo triste que iba a estar cuando supiera de mi muerte. Pensé en mis hijos y no puedo poner en palabras las emociones que me inundaron sobre la pérdida que iban a tener que tolerar. Ordené todo esto, o eso creía, y finalmente concluí que los dos mayores irían a vivir con su padre y, aunque estarían tristes, también estarían bien. Los dos más pequeños irían a vivir con mis padres y también estarían bien. Podía sentir que me iba nuevamente; supe que eso era todo. Era el final. Iba a morir. Al exhalar lo que pensé era mi último aliento, recé: “querido Dios, dale a mi mamá la fuerza necesaria para cuidar a mis hijos un día a la vez”. Luego, rezé: “gracias, Jesús. Estoy volviendo a casa”.

¡Entonces todo se volvió blanco! No negro como antes y podía sentir que me movía entre la blancura, hacia arriba viajando muy rápido. Desde abajo escuché a la mujer que se había sentado conmigo comenzar a gritar: “oh, Dios, dejó de respirar! Traigan enseguida a los paramédicos, dejó de respirar”. Pensé: “necesito calmar a esta mujer, debo decirle que está todo bien, quiero irme” y mi sensación de volar se hizo más lenta.

Lo siguiente que recuerdo es a los paramédicos tratando de girarme. Mis ojos se abrieron y comencé a sacudir la cabeza vigorosamente. Usé mis manos para apuntar al pecho y hacer la señal de fractura. Les dije en susurros que quería estar de costado. Los paramédicos trataron de decirme que el dolor provenía del cinturón de seguridad y que no me preocupara porque mi pecho no estaba quebrado. Negué con la cabeza nuevamente, apuntando hacia el pecho y luego hice nuevamente la señal de fractura. “¿Cómo sabe?”, preguntó. Apunté a mi oído y susurré: “lo escuché partirse”. Me dejó sobre mi costado pero me informó que debía quedarme así hasta que llegáramos al hospital. Dije que estaba bien y luego cerré los ojos y me desmayé de nuevo. Lo único que recuerdo del viaje en ambulancia es cuando subió la colina. Recuerdo el dolor y lo incómodo que fue,

No recuerdo la llegada ni nada que pasara en la sala de emergencias. Solo recuerdo la habilidad del médico para despertarme cuando deseaban hacerme alguna pregunta. No hay recuerdos entre las preguntas, ni dolor, ni pensamientos, ni ruidos, nada.

Recuerdo que me pidieron firmar algo, dando permiso para que le removieran el ojo a Mike. Deben haber pensado que era su madre. Negué con la cabeza.

Mientras me llevaban al quirófano, mi tía estaba allí. Preguntó para qué era la cirugía. Una enfermera dijo que era para arreglar los huesos rotos de mi pecho y otra la corrigió y dijo: “no, está sangrando internamente y puede ser su bazo”. Entonces todo se ennegreció de nuevo.

El 27 de mayo, mientras mi consciencia comenzaba a procesar los pensamientos nuevamente, me di cuenta que iba a despertarme. ¿Me animaría a abrir los ojos? ¿dónde estaría? ¿estaba muerta y caminando en el otro lado? ¿sería el Cielo o el infierno? ¿sería algo diferente? Sabía que estaba muerta y que despertaría en el Cielo. No podía escuchar nada, ni mi respiración, ni siquiera mi corazón. Finalmente me animé a abrir los ojos. ¡Cómo me enojé! ¿era un chiste? ¿estoy en el hospital? Mis pensamientos, mi ira, mi decepción; todo estaba fuera de control. No podía ser cierto! Había peleado a la muerte al costado del camino y había perdido. Recordé haber renunciado. ¡Recordé haber muerto! ¡Estaba en el cielo yendo hacia algún lugar! Recuerdo la blancura brillante a mi alrededor, la ausencia de dolor, la paz que sentí y la alegría. ¿Dónde estaba ahora? No está bien. Debe ser una broma. Dios, no es gracioso, no es justo. Quiero ir a casa. “Por favor, llévame a casa”, recé.

Información previa:

Sexo: Mujer

Fecha en que ocurrió la ECM: 'Mayo 24, 2005'

¿En el momento de su experiencia, existía alguna circunstancia que amenazara su vida? Incierto Accidente Era una pasajera en un choque frontal con un auto. No estoy segura para qué es esta pregunta

Elementos de la ECM:

¿Cómo considera el contenido de su experiencia? Completamente placentero

¿Se sintió separado de su cuerpo? Si Nunca miré hacia atrás así que no vi nada pero escuché todo y elegí ignorarlo, es decir, hasta que la mujer que estaba sentada al lado mío comenzó a gritar: “oh, Dios, dejó de respirar! Traigan enseguida a los paramédicos, dejó de respirar”. Entonces, cuando pensé en volver y decirle que estaba todo bien, que yo quería irme, volví a mi cuerpo. La encontré más tarde y ella verificó que había pedido ayuda cuando dejé de respirar.

Claramente abandoné mi cuerpo y existí fuera de él

¿Cómo compararía su máximo nivel de consciencia y alerta durante la experiencia con su consciencia y alerta normal de todos los días? Más Consciente y alerta de lo normal La blancura no era como nada que existiera en la Tierra. Era pura y brillante y radiante. Sabía todo lo que pasaba debajo de mí pero no sentí deseos de mirar hacia abajo hasta que la mujer al lado mío entró en pánico; antes, no podía distinguir ningún sonido debido al dolor y a los desmayos. ¡La sensación de volar fue fenomenal! No fue como ninguna experiencia que hubiera tenido.

¿En qué momento de la experiencia estuvo en su máximo nivel de consciencia y alerta? Al volar a través de la blancura, todo estaba claro; la visión, los olores, la audición, los pensamientos, todos era claro como el cristal una vez que dejé mi cuerpo.

¿Sus pensamientos estaban acelerados? Más rápidos que de costumbre

¿El tiempo pareció acelerarse o ralentizarse? Todo parecía estar sucediendo a la vez; o el tiempo se detuvo o perdió todo significado Como dije antes, era como si mis pensamientos, presentes, pasados y futuros, todo se juntara en un pensamiento.

¿Sus sentidos eran más intensos que de costumbre? Increíblemente más intensos

Compare por favor su visión durante la experiencia con su visión cotidiana que tenía inmediatamente antes del momento de la experiencia. Todo lo que vi fue una blancura brillante pero no era como ningún blanco que hubiera visto

Compare por favor su audición durante la experiencia con su audición cotidiana que tenía inmediatamente antes del momento de la experiencia. Antes de dejar mi cuerpo, todo era un zumbido. No podía escuchar las sirenas, la gente a mi alrededor claramente; todo estaba mezclado. Luego de dejar mi cuerpo, podía escuchar claramente a la gente hablando en el lugar del accidente, las sirenas, los paramédicos, todo!

¿Le pareció ser Consciente de cosas que ocurrían en otro lugar, como si se tratase de percepción extra sensorial (ESP)? Sí, y los hechos han sido comprobados

¿Pasó hacia o a través de un túnel? Incierto. No distinguí un túnel en sí, pero estaba rodeada por una luz blanca brillante. Me di cuenta que me movía porque las voces en el suelo se alejaban cada vez ma´s.

¿Encontró o llegó a ser Consciente de algún ser difunto (o todavía vivo)? No

¿Vio, o se sintió envuelto por, una luz brillante? Una luz de claro origen místico o de otro mundo

¿Vio una luz sobrenatural? Si

¿Le pareció entrar a algún otro mundo sobrenatural? No

¿Qué emociones sintió durante la experiencia? Sentí alegría, paz, amor y felicidad; todo bueno.

¿Tuvo una sensación de alegría? Increíble alegría

¿Sintió una sensación de armonía o unidad con el Universo? Ya no me sentía en conflicto con la Naturaleza

¿Le pareció de repente entenderlo todo? Todo sobre el Universo Esto es difícil de explicar. No fue como si respondieran preguntas o algo así. Solo sabía. No sé cómo, solo lo hice, y nada parecía estar mal. Estaba yendo a alguna parte; no sabía adonde. Solo sabía que quería ir.

¿Volvieron a usted escenas de su pasado? No

¿Vinieron a usted escenas del futuro? No

¿Alcanzó un límite o una estructura física limitante? No

¿Llegó a una frontera o punto de no retorno? No

Dios, espiritualidad y religión:

¿Qué importancia le daba a su vida religiosa / espiritual antes de su experiencia? Incierto

¿Han cambiado sus prácticas religiosas desde su experiencia? No

¿Cuál es su religión ahora? No afiliada – ninguna en particular – religiosa no afiliada

¿Su experiencia incluyó características concordantes con sus creencias terrenales? Contenido que era concordante y no concordante con las creencias que tenía en el momento de la experiencia Habiendo sido criada en la iglesia, sabía que debía haber vida después de la muerte, pero siempre me enseñaron que una vez que muriera iba a estar dormida hasta que Jesucristo volviera. Estaba muy despierta y alerta, lo que está en contra de lo que me enseñaron.

¿Ha tenido un cambio en sus valores y creencias debido a su experiencia? Si Pasé 18 meses creyendo que estaba muerta y atrapada en la otra vida, o que estaba en el hospital en coma y todo era un horrible sueño. Debido a esto, me puse en riesgos que no hubiera asumido de otro modo. Era descuidada, desafiante, moralmente corrupta y nada buena conmigo misma. Era buena con los demás pero no tenía estándares para mi. Una vez que me di cuenta que estaba viva, hice cambios drásticos, tomé responsabilidad sobre mi vida y continué adelante. Los médicos dicen que sufrí estrés postraumático pero eso no explica las voces, rostros otras cosas paranormales que experimenté después del incidente.

¿Le pareció encontrar a un ser místico o una presencia, u oyó una voz no identificable? No

¿Vio usted espíritus fallecidos o religiosos? No

¿Se encontró o tomó consciencia de cualesquiera seres que vivieron previamente en la Tierra y que son descritos por su nombre en las religiones (como por ejemplo: Jesús, Muhammad. Buddha, etc.)? No

¿Obtuvo durante su experiencia información sobre la existencia pre mortal? Si Consciencia de que hay vida después de la muerte, hay paz, amor y felicidad eternamente

¿Obtuvo durante su experiencia información sobre conexión universal o unidad? No

¿Obtuvo durante su experiencia información sobre la existencia de Dios? No

Con respecto a nuestras vidas terrenales aparte de la religión:

¿Obtuvo durante su experiencia conocimiento o información especial sobre su finalidad? No No tuve tiempo de hacer preguntas específicas pero no lo necesité. Ya sabía todo lo que necesitaba saber. Estaba confortable, sin miedo, muy segura de todo. Es difícil de explicar.

¿Obtuvo durante su experiencia información sobre el sentido de la vida? No

¿Cree en la vida después de la muerte después de su experiencia? Incierto Si En cuanto me di cuenta que no estaba en mi cuerpo, se confirmó que HAY vida después de la muerte. Aunque no llegué a mi destino final, supe que existe.

¿Obtuvo información sobre cómo vivir nuestras vidas? Si No temas morir, es el siguiente paso hacia el resto de tu vida. Pero al mismo tiempo, no tengas miedo de vivir. Haz que cada momento sea el mejor de tu vida. ¡No tengas remordimientos! Cada elección que has hecho te ha llevado a donde estás ahora. No debería haber vergüenza o remordimiento en eso.

¿Obtuvo durante su experiencia información sobre dificultades de la vida, desafíos y adversidades? Incierto Volví pensando que estaba todavía muerta. Me llevó 18 meeses darme cuenta que estaba viva. Cuando pasaban cosas negativas me reía porque, después de todo, nada podía lastimarme porque ya estaba muerta.

¿Obtuvo durante su experiencia información sobre el amor? Si Durante la experiencia todo fue amor. Yo era amor, la blancura era amor, la sensación de volar era amor. ¡Era increíble!

¿Qué cambios de vida ocurrieron en su vida después de la experiencia? Incierto Tengo más aceptación y paciencia hacia los demás. Tengo una mente totalmente abirta y creo completamente que cualquier cosa normal o paranormal es posible. Diría que tengo la mente abierta al punto de ser crédula. No dudo de ninguna experiencia extraña que la gente me cuenta, creo que es tan verdad como ellos lo cuentan.

¿Han cambiado sus relaciones específicamente debido a su experiencia? Si Acepto a la gente ahora. No siento la necesidad de cambiarlos. Si hay una discusión, puedo estar calmada y aceptar sus sentimientos y emociones sin sentir que me atacan personalmente.

Después de la ECM:

¿Fue la experiencia difícil de expresar con palabras? Si No hay suficientes palabras para explicar la experiencia. Increíble, fenomenal, maravillosa; es todo lo que se puede decir y esas palabras no se arriman a la realidad de lo que pasó.

¿Con qué precisión recuerda la experiencia en comparación con otros acontecimientos de la vida que ocurrieron en la época de la experiencia? Recuerdo la experiencia con más precisión que otros acontecimientos de la vida que ocurrieron en la época de la experiencia

¿Ha tenido tras la experiencia dones psíquicos, no ordinarios u otros dones especiales que no tuviera antes de la experiencia? Si Tuve una ECM en el útero de la que no recuerdo pero toda mi vida pude ver a través de la gente. De niña, trataba de decírselo a mi madre pero ella no lo veía. Luego de esta ECM tenía rostros, miles de ellos, tratando de pasar por el techo mientras susurraban. Me asustaban y les gritaba que hablaran de a uno por vez y luego desaparecían. Fui tocada físicamente por gente que no estuvieron allí dos veces; uno fue mi tío Larry que había muerto ese día y otra vez fue alguien desconocido. He visto pequeñas familias vestidas con estilos extraños. He tenido sueños que se hicieron realidad y he conocido gente de la que ya sabía cosas que no debería haber sabido.

¿Hay una o más partes de la experiencia que son especialmente significativas o importantes para usted? La experiencia fue significativa porque ahora cualquier duda que hubiera tenido antes ha desaparecido.

¿Ha compartido usted alguna vez esta experiencia con otros? Si La compartí unos 3 a 4 años después. Una corta versión de esta experiencia ha sido publicada en un libro llamado Visitas al Cielo, de Josie Varga. Nadie más que Josie me ha prestado atención. Me llevó un tiempo comprender y todavía no logro comprender la parte de ”después” pero estoy en proceso de tratar de armar un documento y tal vez algún día un libro.

¿Tenía usted algún conocimiento de las experiencias cercanas a la muerte (ECM) antes de la experiencia? Si Mi madre tuvo una hemorragia cuando estaba el el octavo mes de embarazo de mi. Tuvo una ECM y una experiencia extracorpórea que me contó varias veces. Yo padecí de falta de oxígeno y casi no sobreviví. No creo que el conocer sobre ECMs haya cambiado o afectado mi experiencia para nada. La mía fue completamente diferente de la de mi madre.

¿Qué pensó sobre la realidad de su experiencia poco tiempo después (días o semanas) de que sucediera? La experiencia fue definitivamente real

¿Qué piensa ahora sobre la realidad de su experiencia? La experiencia fue definitivamente real

¿En cualquier momento de su vida, ha habido alguna vez algo que le haya reproducido parte de la experiencia? No

¿Hay algo más que le gustaría añadir acerca de su experiencia? Fue lo más maravilloso y positivo que haya sentido!

¿Hay alguna otra pregunta que podríamos hacer para ayudarle a comunicar su experiencia? No hay otras preguntas que se me ocurran hacer.