Descripción de la experiencia:

Estuve en el salón de emergencia por varias horas. Alrededor de las 3 de la mañana, finalmente me dijeron que tenían un cuarto para mí. Mi último pensamiento consciente fue “Gracias Dios Mío”.

De repente me encontré en el espacio y vi solamente un banco de nubes grises un poco más arriba en mi campo de visión. No vi la Tierra en absoluto. Detrás de las nubes estaba este tremendamente brillante haz de luz, igual que cuando el sol está bajando y se ve detrás de una nube. Pero esta luz era mucho más brillante. Me dije a mí misma, “guau, no estoy respirando, pero no me importa”. No sé cómo es que sabía que no estaba respirando, no estaba incómoda por nada e incluso no estaba tratando de respirar. La sensación que tenía era de una completa alegría, paz y amor. Sabía que estaba sonriendo. Comencé a ir hacia la luz, entonces de repente, allá arriba, cerca de la luz, un par de hermosos portones de caoba tallados salió de entre las nubes, y se cerraron con un portazo. Sentí el portazo de los portones como si fuera un sonoro choque desde atrás.

Los portones estaban tallados y parecía como el tejido de una canasta, sólo que era sólido, no había tejido. Yo dije algo como “guau” y entonces retrocedí un poquito. Todavía estaba muy, muy feliz y llena de la misma paz y sentimientos de verdadero amor. Mientras miraba a los portones desde la distancia, un segundo par de portones, esta vez de caoba sólida, finamente terminada, salió de entre las nubes a una distancia mucho más cercana. Otra vez escuché el portazo fuertísimo cuando se cerraban y pude sentir que mi cuerpo vibró con el golpe. Otra vez, retrocedí un poquito todavía sintiendo la misma maravillosa paz.

Entonces, parecía que yo estaba sentada al pie de una cama de hospital y que un hermosísimo ángel apareció parado delante de mí. Mis brazos estaban en los lados y mis manos estaban en mi regazo.

Ella tenía un cabello de brillante color dorado, toda la cabeza, que parecía brillar como una aureola, pero era el brillo de su cabello. Sus ojos eran azul claro, y ella tenía puesto un vestido largo color marrón suave, que se cruzaba al frente. El vestido tenía un borde en oro y ella tenía un grueso cordón dorado alrededor de su cintura. Yo me preguntaba por qué su vestido era marrón.

Ella puso sus brazos apretadamente alrededor de mi cuerpo y miró directamente dentro de mis ojos.

No habló verbalmente, pero con sus ojos yo supe lo que ella dijo. “Tú no vas a ningún lado. Vas a quedarte aquí.” Sus ojos tenían esa mirada de imponente firmeza, pero también estaban llenos de amor. Me sentí que le devolvía una mirada sonriente.

Inmediatamente escuché una voz en mi oído izquierdo, diciendo, “¡Tuvo un paro respiratorio! Abrí los ojos y era mi doctor diciendo a mi familia lo que había pasado. Yo estaba con un respirador, así que no podía hablar, pero inmediatamente indiqué que deseaba escribir. Escribí en un papel que había visto la luz y a un ángel. Yo tenía plena comprensión de lo que estaba pasando y podía contestar todas las preguntas que le doctor me preguntaba. Creo que él me estaba chequeando a ver si había algún tipo de daño cerebral. Yo simplemente contestaba moviendo la cabeza Sí o No y él estaba satisfecho con mis respuestas.

Nota: Estuve en el hospital alrededor de dos semanas, y antes de que dejara el hospital, aproximadamente ocho enfermeras y tres doctores que no eran los que me atendían, vinieron a mi cuarto, cerraron la puerta y me pidieron que les diga lo que vi. Todos ellos parecían creerme y algunas de las enfermeras dijeron que era un gran alivio saber qué puede suceder con sus pacientes que mueren. La historia parece que le resultó una gran ayuda emocional.

Pude dar mi testimonio a varios grupos de la iglesia, y siempre pareció de ayuda a personas mayores. Me gusta hablar del tema y mi vida ha cambiado mucho desde aquel día. Siento mucho amor por todas las personas y deseo que tengan la misma paz que yo tengo. Pude decirle la historia a mi madre, ella falleció a los 92 años en junio, y sé que ella murió con mucha paz.

Después de DESCRIPCIÓN DE LA EXPERIENCIA, Preguntas aclaratorias:

1. ¿Fue la experiencia difícil de expresar en palabras? No.

2. Al momento de la experiencia ¿había algún peligro de vida? Sí. Tenía Miastenia Gravis. La medicación que tomé entró en mis pulmones en lugar de ir al estómago. Llamé a 911 por dificultad de respirar. En el hospital, tuve un paro respiratorio.

3. ¿En qué momento durante la experiencia estuvo más alerta y consciente? Estuve completamente alerta en todo momento, y no podría decir si hubo un momento más real que otro, excepto por los portazos cuando los portones se cerraron. Allí pareció que como que mi cuerpo tuvo un shock.

4. ¿Cómo se compara el nivel de consciencia durante la experiencia con el nivel normal diario? Estaba más consciente y alerta que lo normal.

5. Si su nivel más alto de consciencia y alerta era diferente de su nivel normal, explique: Estaba completamente alerta en todo momento.

6. ¿Su visión era distinta de alguna manera de su visión normal de todos los días? No.

7. ¿Su oído era distinto de alguna manera, de su oído normal, de todos los días? No.

8. ¿Experimentó una separación de su consciencia de su cuerpo? Sí.

9. ¿Qué emociones sintió durante la experiencia? Paz, Amor, Excitación por estar yendo hacia la luz, Alegría. Todas emociones muy positivas y amorosas.

10. ¿Pasó usted a través de un túnel? No.

11. ¿Vio usted una luz? Sí. Era como una muy brillante luz de búsqueda, como la luz que se usa en el escenario como luz de fondo para la entrada de una celebridad a un concierto.

12. ¿Se encontró o vio otros seres? Sí. Vi un ser que era un hermoso ángel. Tenía un hermoso cabello dorado que brillaba como una aureola, pero no tenía halo ni alas. Estaba vestido con un vestido largo color marrón claro, cruzado al frente, bordeado de dorado y ceñido a la cintura con un cordón dorado. Tenía hermosos ojos azules que parecían mirar a través de uno. Habló con esos ojos directamente a través de mi mente y dijo, “Tú no vas a ir a ningún lado, te quedarás aquí mismo”. Me dio una mirada de autoridad, y al mismo tiempo, sentí amor por ella.

13. ¿Experimentó una revisión de eventos de su pasado? No.

14. ¿Observó o escuchó algo relativo a personas o eventos durante la experiencia que se puedan verificar más tarde? No.

15. ¿Vio o visitó algún lugar hermoso, niveles o dimensiones? No estoy segura. No estaba en la Tierra. Solamente vi las nubes y la luz.

16. ¿Tenía usted una sensación de tiempo o espacio alterado? No.

17. ¿Tiene usted la sensación de tener algún conocimiento especial o propósito? Sí. Sin ninguna duda, hay un lugar celestial.

18. ¿Alcanzó usted una frontera o estructura que limitara físicamente? Sí. Los portones me impidieron seguir más adelante y no protesté.

19. ¿Se volvió consciente de eventos futuros? No.

20. Después de la experiencia ¿Le quedó algún don psíquico que no tenía antes de la ECM? No estoy segura. Me parece darme cuenta de los sentimientos de desesperación de la gente más fácilmente. Percibo cuando alguien necesita un abrazo o una palabra de ánimo.

21. ¿Ha compartido su experiencia con otros? Sí. Cuando volví, estaba en un respirador, pero le indiqué al doctor que deseaba escribir. Escribí que había visto la luz y a mi ángel. También compartí mi experiencia con muchas personas del personal médico y con grupos religiosos. Sé que la gente me cree y que eso le da paz. Una persona vino a mí y me dijo, “Sé que está diciendo la verdad, porque no se ven colores en un sueño. No sé si eso es verdad, pero él lo creía.

22. ¿Tenía algún conocimiento de experiencias ECM antes de la suya? Sí. Mi padrastro murió temporalmente durante una cirugía y me dijo que estaba cayendo a través del fuego del infierno. Después de eso dedicó su vida al Señor. Mi pastor tuvo un accidente de auto y se sintió volando fuera del cuerpo y mirando hacia abajo, vio que su zapato se le había salido y estaba del otro lado del camino en el campo. Cuando volvió al cuerpo le pidió al oficial que le trajera su zapato. Siempre creí en las ECM, así, mi experiencia simplemente verificó mi creencia.

23. ¿Cómo vio la realidad de su experiencia a los pocos días de sucedida? La experiencia fue definitivamente real. Siempre me pregunté porque había dos diferentes portones.

24. ¿Hubo una o varias partes de la experiencia especialmente significativa para usted? Sí, estoy contenta sabiendo que tengo un ángel cuidándome, y que cuando finalmente muera, iré al cielo.

25. ¿Cómo ve ahora la realidad de su experiencia? La experiencia fue definitivamente real. Todavía tengo las mismas emociones y sentimientos que antes.

26. ¿Han cambiado sus relaciones como resultado de su experiencia? Sí, ahora tengo más tolerancia y paciencia con la gente y trato de ayudar más. También comparto mucho más mis experiencias con el Señor.

27. ¿Han cambiado sus creencias y prácticas religiosas como resultado de su ECM? Sí, se han hecho mucho más profundas.

28. Después de su experiencia, ¿ha habido otros eventos en su vida, medicaciones o substancias que reproduzcan alguna parte de la experiencia? No.

29. ¿Hay algo que desee agregar concerniente a la experiencia? Sí, si uno tiene miedo de morir, es mejor que lo descarte. Puede que los momentos en que se produce la muerte no sean agradables, pero la alegría del más allá es algo por lo que debemos interesarnos con mucha anticipación.

30. Las respuestas a las preguntas hechas y la información que usted dio, ¿describen adecuadamente su experiencia? Sí, he vuelto a reescribir varias áreas de la experiencia una y otra vez, y todavía se mantiene igual.