ECM de Paul J
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Descripción de la experiencia:

Yo era consciente de que estaba despertando de la operación. Empecé primero a oír las voces del cirujano y del equipo, y les oía decir: “¡Respire Paul! ¡Respire!”. Les oí decir que aplicarían aire por un tubo pero yo era reticente, e incluso incapaz de intentar respirar. Mi cuerpo era un peso muerto que me parecía no tener nada que ver “conmigo”. Lo que ocurrió a continuación me pareció durar cerca de una hora, a pesar de que fueron solo segundos.

Sentí que mi mente estaba aproximadamente a 1’20 metros a la derecha de mi cabeza. Sabía que aún estaba en el quirófano, pero ya no formaba parte de él. De repente, sentí como si alguien me estuviese empujando suavemente por detrás. “Es su turno”: dijo una voz y me quedé muy sorprendido pues tenía la impresión de que estaba al final de una larga, larga fila de gente (que no podía ver sino solo sentir). ¡Recuerdo que la sensación era justo como ser enviado al frente de la cola en una caja de supermercado! Agradable sorpresa.

Frente a mí, vi entonces una enorme puerta rectangular abierta y más allá una completa oscuridad. Alrededor, el quirófano empezó a desaparecer y me aproximé a la entrada. El sentimiento era el de una paz absoluta. No existía dolor, ni aflicción. Era indescriptible. Entonces vi el número 49 de aproximadamente 1 metro de alto frente a mí (mi edad por aquel entonces) y dije: “¿Solo 49, eh? Creí que llegaría por lo menos a los 50” y me reí. Me sentía tan feliz, pero entonces recordé que mi hija iba a casarse el verano siguiente, y que yo estaba ansioso por recibir pronto un diploma de la universidad a distancia.

Entonces oí de nuevo las voces del personal del quirófano, y fui violentamente empujado de vuelta al interior de mi cuerpo, empecé a sentir dolor en mi garganta mientras extraían el tubo. Me sentía “pesado” de vuelta al interior de mi cuerpo, y quería regresar de donde había venido. Tuve después un dolor de cabeza durante dos días y una sensación de que no pertenecía realmente a este mundo, sino que era mi deber permanecer en él. El mundo parecía tan gris, tan pesado, casi “muerto” en comparación con mi experiencia. ¡Me llevó algunos días acostumbrarme a todo de nuevo! Era como si me hubiese ido durante mucho tiempo.

¿Alguna medicación asociada o sustancias que pudieran afectar la experiencia? No estoy seguro. Anestesia durante una operación de rutina. Mientras despertaba dejé de respirar y me tuvieron que dar oxígeno.

¿Fue la experiencia difícil de expresar con palabras? Sí. El súbito cambio de sentimientos y la sensación de que el tiempo estaba dislocado. No estaba muerto, sino fuera de mi cuerpo.

¿En el momento de la experiencia, existía algún acontecimiento que amenazara su vida? Sí. Mi garganta se cerró y no podía respirar.

¿Cuál era su nivel de consciencia y de vigilancia durante la experiencia? Explicado más arriba.

¿Era la experiencia de algún modo parecida a un sueño? No.

¿Experimentó una separación entre su consciencia y su cuerpo? Sí. Sí, era consciente de mi cuerpo tendido allí pero no lo veía pues estaba mirando a otra parte.

¿Qué emociones sintió usted durante la experiencia? Sorpresa, después absoluta dicha. Completa indiferencia a lo que le estaba ocurriendo a mi cuerpo. Confusión y frustración al regreso.

¿Oyó usted algún sonido extraño o ruidos? No. Las voces del personal se desvanecieron, pero no había sonido. Yo parecía “leer mentalmente” las palabras que oía y hablaba.

¿Reconoció usted lugares familiares o lugares concernientes a enseñanzas religiosas conocidas o bien vio usted lugares poblados de criaturas increíbles o sorprendentes? No.

¿Vio usted una luz? No. Al contrario. Vi una oscuridad, pero era acogedora y no horripilante. Parecido a como deseas la oscuridad si tienes una migraña.

¿Se encontró usted o vio a algún otro ser o seres? Sí. Alguien estaba detrás de mí, guiándome, pero nunca le vi. No era ni masculino ni femenino, solo era “alguien”. No puedo describir la voz pues no era audible. “Leía mentalmente” sus palabras.

¿Experimentó usted algo mientras estuvo fuera de su cuerpo o en otro estado alterado de consciencia? No. No sentía poder. Otros tienen el poder, yo sentía como si estuviese “siguiendo órdenes” y era muy feliz de hacerlo así.

¿Observó usted u oyó algo relacionado con personas o acontecimientos durante su experiencia que pudiera ser verificado más tarde? No.

¿Observó cómo funcionaban sus 5 sentidos, y en caso afirmativo, en qué se diferenciaban a como lo hacían normalmente? Sí. Descrito más arriba.

¿Tuvo alguna sensación de alteración del tiempo o el espacio? Sí. Todo era igual, pero distinto. El “aquí” y el “ahora” eran un lugar. Lo mismo pasaba con el tiempo. Era todo lo mismo. No había tiempo lineal. Ni espacio como lo conocemos.

¿Tuvo usted la sensación de comprender una sabiduría especial, un orden y / o propósito universal? Sí. Hay un tiempo para todo. Un papel para cada uno. Una razón para todo. El propósito de la vida no es solo nuestra propia felicidad.

¿Alcanzó usted un límite o una estructura física de delimitación? No estoy seguro. Gran puerta abierta, reconfortante oscuridad apaciguadora más allá. Sin miedo. Iba hacia ella, pero regresé.

¿Tuvo usted consciencia de acontecimientos futuros? No.

¿Se implicó en, o fue consciente de, una decisión de vuelta al cuerpo? Sí. No quería volver a mi cuerpo, pero fui forzado.

¿Cómo resultado de su experiencia, ha recibido usted dones psíquicos, paranormales u otros dones especiales que no tuviera antes de la misma? No.

¿Tuvo usted tras su experiencia algún cambio de actitudes o creencias? No.

¿Ha afectado la experiencia a sus relaciones? ¿Vida diaria? ¿Prácticas religiosas etc.? ¿Opciones de carrera? Tengo las mismas creencias liberales que antes.

¿Ha cambiado su vida expresamente como consecuencia de su experiencia? No estoy seguro. Pienso en la experiencia muy a menudo y me pregunto si hay para ella una explicación lógica o no. No sé si quiero averiguar si solo fue una respuesta fisiológica a la anestesia.

¿Ha compartido usted esta experiencia con otros? Sí. Los médicos dijeron que solo era un síntoma de la anestesia. ¡Algunos amigos estaban obviamente nerviosos en lo relativo a ello, no querían hablar de la muerte, etc.! Mi hija también estaba asustada. Nadie parecía sentir en relación con todo ello como yo lo hacía.

¿Qué emociones experimentó usted después de su experiencia? ¡Frustración de estar de regreso en la tierra! Esto paulatinamente cambió al aprecio por la vida que siempre había sentido.

¿Cuál fue la mejor y la peor parte de su experiencia? Lo mejor: la felicidad de estar fuera del cuerpo. Lo peor: ser arrastrado de vuelta hacia atrás.

¿Tras su experiencia, tuvo usted algún otro acontecimiento en su vida, medicamentos o sustancias que reprodujeran alguna parte de la experiencia? No. No desde entonces sino antes, cuando tenía siete años. Durante una operación de amígdalas, podía ver a los médicos y a las enfermeras trabajando en mi cuerpo mientras yo revoloteaba cerca del techo. Recordaba que vestían ropa verde (que solo vestían en el quirófano y que por supuesto yo nunca había visto antes).

¿Las preguntas planteadas y la información que acaba usted de proporcionar describen exacta y exhaustivamente su experiencia? Sí.

Por favor, ofrezca cualquier sugerencia que tenga para mejorar este cuestionario. Si la persona ha tenido alguna experiencia similar ANTES de la que está relatando.