Descripción de la experiencia:

¿Cómo es tener una experiencia de casi muerte? Cuando tenía treinta y seis años, mi hijo menor y yo descubriríamos que es ambas cosas: maravilloso y terrible. Siempre llamaré a William mi “bebé milagroso” por cuanto se combinaron muchos eventos extraños para traernos de vuelta del borde de la muerte.

Cuatro años antes de esto, en el comienzo de este viaje, tuve un sueño extraño. Me encontré a mí misma descendiendo en la cima de un planeta pequeño; el cielo estaba bordeado de rosado y verde azulado y detrás de aquello se extendía la oscuridad del espacio. Había un espíritu luminoso que reconocí como Sai Baba esperándome allí. Cuando descendía quise correr hacia él pero en cambio me señaló en silencio dos figuras a unos cuatro metros de distancia. Allí vi a dos niños pequeños, uno media cabeza más alto que el otro y de pie muy juntos.

Supe de inmediato que me estaban mostrando dos futuros hijos. Instintivamente grité: -“¡No por favor, no más hijos!

Mis circunstancias no podrían haber sido peores: ¡Sola, con siete hijos, cinco menores de cuatro años! El daño a mi corazón debido al embarazo de gemelos había empeorado progresivamente con los dos embarazos subsiguientes. Físicamente, era la sombra de lo que había sido; también aquejada de daños en la espalda y las articulaciones pero aparentemente inmutable a mis ruegos, el espíritu volvió a señalar a los dos niños. De aquí que caminé directo hacia ellos para saber si podía ver cómo eran. Los miré a los ojos y sólo vi las estrellas de detrás de nosotros pasando por sus ojos. Sai Baba se fue caminando lentamente y lo observé hasta que casi se tornó demasiado pequeño para verlo y luego desapareció en el horizonte. Me desperté angustiada e intrigada por la experiencia.

Ahora, cuatro años después, aquí estaba yo: casada, embarazada de treinta y cinco semanas de mi noveno hijo, y sí, ya había tenido el primer niño del sueño, Max. Mi esposo había declarado que quería una niña las dos veces que quedé embarazada. Le advertí que no se esperanzara mucho ya que creía que veríamos a los dos niños de aquel sueño vívido.

Justo antes del nacimiento de este noveno niño, William, ocurrieron una cantidad de hechos extraordinarios. El problema de corazón se había vuelto un asunto apremiante y la compresión en mi columna vertebral me había llevado a perder algo de músculo en una pierna dificultándome el caminar. Ese día me había despertado sintiéndome estresada y con una profunda sensación de que algo iba a suceder. En la mañana sentí claramente una voz que me decía:-“¡Debes ir al hospital!” ¿De dónde provenía esa voz? ¿Era mi propia intuición o alguien estaba ayudándome? No lo sabía pero sonaba tan insistente que sentía que debía actuar. El bebé no nacería sino en unas cinco semanas, así que ¿cómo sería admitida en el hospital que tomaba una hora de viaje en auto? No tenía ninguna razón de urgencia para ir.

Llena de una sensación de urgencia y después de haberlo pensado un poco, decidí que cuando llegara al hospital pediría que me ayudaran con el dolor y la dificultad que sentía al caminar. Entonces eso fue lo que hice y le insistí a un reacio doctor que se me admitiera para hacerme exámenes. Más tarde, cuando los doctores me preguntaron qué síntomas tenía, respondí: “Sólo escriban oveja agotada – eso lo sintetiza- ¡creo!” Se rieron y pidieron exámenes para más tarde ese día. A la hora de ser admitida, tuve una hemorragia.

“Entonces esta es la razón por la que tenía que venir”, pensé mientras almorzaba más tarde ese día sintiéndome más relajada. “Problema terminado”. Después de todo tenía fecha para el nacimiento del bebé en cinco semanas, por tanto, había tiempo de sobra pero al mirar el cielo a través de las grandes ventanas de vidrios de cristal, miles de pequeñas estrellas comenzaron a precipitarse hacia mí a una velocidad vertiginosa. Me sentía propiamente como si hubiese estado sentada en el habitáculo de la nave Entreprise de Star Treck viajando a toda velocidad por el espacio. Razoné y subí cojeando a mi cama para recostarme. A esas alturas me costaba respirar; nada inusual, ya que me costaba mucho esfuerzo ahora pero mi visión periférica parecía estar desapareciendo también. ¿Qué es esto? Nubes oscuras se reunían frente a mis ojos.

Estaba acostada en la cama tratando de respirar cuando otra paciente se acercó y me pidió un lápiz. “Está segura que no tiene uno?” continuó preguntándome al tiempo que se lo negaba con la cabeza y sin aliento le dije: “¡No, no, no en este momento!” Se fue sin preocuparse pero me temía que pronto perdería la consciencia. Desesperadamente apreté el botón de llamada para que viniera la enfermera – no hubo respuesta – el timbre no sonaba. Luego, haciendo un esfuerzo supremo, y con la poca visión que me quedaba, le susurré a la paciente de la cama de al lado: “Por favor, llama a una enfermera”.

Llegó una con un modo relajado y preguntó: -“¿Cuál parece ser el problema?”. Con el poco aliento que tenía logré decirle:-“¡No puedo respirar, no veo!”. La veía como una mancha gris rodeada de nubes en movimiento. Remarcó desinteresadamente: -“Tuve eso el fin de semana pasado, ¡probablemente tengas una infección en el oído medio! Quedé atónita frente a este diagnóstico casual. La situación se estaba poniendo más y más cómica - tantas tardanzas inexplicables – Me hubiera reído en voz alta si hubiera sido capaz. Aquí estaba, pensaba, luchando para mantenerme consciente y seguir respirando, y aparentemente todo era simplemente tan falto de interés.

Tomando una bocanada de aire, traté de decirle a la enfermera que mis oídos estaban bien. Luego, casi distraída, se acercó y me tomó el pulso. Luego, llena de dramatismo, apretó mi mano y gritó:-“¡No te vayas a ninguna parte! ¡Espera aquí!” y salió como el rayo al corredor en busca de ayuda, debido a que aparentemente mi pulso estaba en 200 y demasiado rápido para registrarlo. Irónico, realmente, que me pidiera “que esperara”. Yo era como una ballena varada en la playa, ahogándome en el aire y sí, definitivamente “¡no yendo a parte alguna”!

En el preciso momento en que la enfermera salió corriendo al corredor, apareció frente a ella un especialista en corazón que aparentemente no caminaba por esos corredores normalmente ¡y casi lo chocó! Entró a la sala e inmediatamente reconoció los síntomas de falla cardíaca y montó todo el equipo necesario para hacer una misión de rescate. (Después me dijeron cuán afortunada había sido. Al parecer, el único miembro disponible del equipo que había aquél día, era un interno inexperto).

No hubiese podido darse cuenta rápidamente de lo que estaba sucediendo. Me dijeron que, si este especialista no hubiera ido caminando por el corredor en ese preciso momento, hubiera ocurrido una demora fatal. Rápidamente sentí que me pusieron un paquete sensor de gel frio en la espalda y que me pinchaban los dedos de los pies y me preguntaban si los sentía pero tenía tanto frio y estaba tan entumecida que no sentí más nada. Empecé a flotar y sólo escuchaba vagamente lo que decían.

Me encontré flotando en un largo túnel. Miré todo lo que me rodeaba y me percaté de la presencia de una luz suave y cautivante al final. Quise correr hacia ella pero encontré difícil moverme hacia adelante y pude hacerlo sólo forzándome a ir hacia adelante mitad nadando y mitad caminando. Luego escuché una débil voz distante exclamar: -“¡Ritmo sinusal colapsando, la estamos perdiendo!” pero me sentí completamente desinteresada en ello. No sabía de quién hablaban y me enojó la interrupción. En ese momento sólo tenía ojos para la maravillosa luz brillante al final del túnel que parecía contener la promesa de una gran calidez y amor sin fin. ¡Me sentía tan dichosa y excitada! Toda la consciencia de mi cuerpo en la cama me dejó cuando traté, por algún tiempo, de alcanzar la luz. Sabía rotundamente que me esperaban cosas maravillosas si sólo llegaba al final del túnel.

Entonces la luz se agrandó y pude ver borrosos contornos de figuras esperando allí, llamándome para que me acercara. Me pregunté: -“¿Quiénes están esperando allí, son ángeles o seres queridos?”

Era muy difícil dejar aquella promesa de amor y calidez que todo lo envolvía a la espera en la luz, y aquellos seres llenos de luz esperando allí. El regreso al túnel fue brutalmente repentino. Volví a la consciencia para experimentar total caos; los doctores gritaban y me dolía todo el cuerpo. Me sentía helada pero pude ver que ciertamente estaba embarazada. Mis recuerdos regresaron y supe que tenía varios niños y otros que me necesitaban para seguir adelante. Luché para regresar y, a pesar de que el ritmo cardíaco era inestable, empecé de inmediato el trabajo de parto.

Especialistas de corazón de rostros serios me dijeron: -“No puedes tener el bebé todavía, vamos a asistir el parto cuando tu corazón se haya estabilizado”. No discutí, entendía su punto pero sabía por mis anteriores ocho partos que este trabajo de parto no era un viaje de ensayo. Por tanto, exhausta, me armé de valor para pasar un alarga noche. Tanto si era o no el momento correcto, este bebé venía en camino.

Más tarde ese día, me informaron que mi corazón había dejado de latir durante un tiempo, y que si este episodio hubiera ocurrido en nuestra casa, a una distancia de más o menos una hora en auto del hospital más cercano, ambos William y yo hubiéramos muerto. Reflexioné sobre aquél mensaje urgente en la mañana – no es de extrañar que tuviera que llegar al hospital ese día. ¡Qué extrañas las muchas demoras que llevaron a la enfermera a chocar con el especialista en corazón! Me di cuenta que de alguna manera había estado protegida durante todo el tiempo durante esta crisis. También sentí enorme gratitud por la enfermera que me había gritado al oído porque me di cuenta que sólo regresé porque me llevó a hacerlo.

Al amanecer del dia siguiente, con el trabajo de parto bien avanzado, un equipo de especialistas de corazón de caras adustas se reunió para asistir el parto. Me conectaron a un equipo de monitoreo cardíaco y tenia agujas en los pies, brazos y manos. El recalcitrante corazón todavía latia y oscilaba. Sus ominosas expresiones me decían que no albergaban demasiadas esperanzas para nuestras oportunidades bajo anestesia. Me pregunatron:-“ ¿Quisiera dejar algunos mensajes?”. “Ninguno”, respondi. My esposo y mis hijos sabían que los amaba, se los decía todos los dias. Desde que había visto a los dos niños pequeños de pie, juntos, en aquél planeta en aquel sueño cuatro años atrás, me sentia segura de que al menos William sobreviviría para estar con su hermano. Cuando me tomó la anestesia, me senti completamente en paz. Después de todo, había estado cerca de la Luz y era tan maravilloso, que no me quedaba resto de miedo a la muerte. William vino al mundo con solo pequeñas dificultades, ¡aparentemente ileso por su adventura pre natal en la nave de Star Trek!

Información previa:

Sexo: Mujer

Fecha en que ocurrió la ECM: 7 de agosto de 1.990

¿En el momento de su experiencia, existía alguna circunstancia que amenazara su vida? Si Parto Ataque Colapso del ritmo sinusal, sin pulso, cesación de la respiración. ECM debida a ataque cardíaco durante el embarazo. Notable premonición anterior de dos niños que tendría. El segundo de estos dos, sería el que daría a luz justo después de su ataque cardíaco.

Elementos de la ECM:

¿Cómo considera el contenido de su experiencia? Enteramente placentero.

¿Se sintió separado de su cuerpo? Si Escuché al doctor decir: -“El ritmo sinusal está colapsando, ¡La estamos perdiendo!” Eso se confirmo más tarde. Escuché el pequeño grito de la enfermera; el equipo lo confirmo más tarde. Claramente abandone mi cuerpo y existi fuera de el.

¿Cómo compararía su máximo nivel de consciencia y alerta durante la experiencia con su consciencia y alerta normal de todos los días? Más Consciente y alerta de lo normal Sabía que estaba muriendo o que estaba muerta. No había carga emocional en ello y sentía una gran dicha y vivacidad con la expectativa de llegar al final del túnel. Sabía con todo mi ser que el siguiente paso en mi viaje sería maravilloso y lleno de dicha y amor.

¿En qué momento de la experiencia estuvo en su máximo nivel de consciencia y alerta? Durante toda la experiencia.

¿Sus pensamientos estaban acelerados? No

¿El tiempo pareció acelerarse o ralentizarse? Todo parecía estar sucediendo a la vez; o el tiempo se detuvo o perdió todo significado El tiempo pareció correr más rápido o más lento que de costumbre. La consciencia del tiempo desapareció por completo.

¿Sus sentidos eran Más intensos que de costumbre? Increíblemente más intensos Compare por favor su visión durante la experiencia con su visión cotidiana que tenía inmediatamente antes del momento de la experiência Inmediatamente antes iba camino de tener falla cardíaca, y todas las percepciones empezaron a hacerse más borrosas; por ej. no veía al personal médico claramente, eran nubes oscuras a través de mi visión pero en la experiencia había total claridad de visión.

Compare por favor su audición durante la experiencia con su audición cotidiana que tenía inmediatamente antes del momento de la experiencia. Durante la experiencia mi audición de la habitación en tiempo real y de las voces, se desvaneció gradualmente y sólo cuando una enfermera me GRITO al oído, escuché una pequeña versión chillona de aquel grito como desde una gran distancia. Mi audición diaria antes de la experiencia era particularmente aguda debido a la situación en que me encontraba donde nadie a mi alrededor parecía notar que estaba a punto de morir.

¿Le pareció ser Consciente de cosas que ocurrían en otro lugar, como si se tratase de percepción extra sensorial (ESP)? Sí, y los hechos han sido comprobados

¿Pasó hacia o a través de un túnel? Si

¿Encontró o llegó a ser Consciente de algún ser difunto (o todavía vivo)? No

¿Vio, o se sintió envuelto por, una luz brillante? Una luz de claro origen místico o de otro mundo

¿Vio una luz sobrenatural? Si

¿Le pareció entrar a algún otro mundo sobrenatural? Un reino claramente místico o sobrenatural

¿Qué emociones sintió durante la experiencia? Gran dicha ante la posibilidad de llegar a la luz; algo pesarosa por no haber podido completar el viaje y tener que regresar.

¿Tuvo una sensación de paz o de agrado? Increíble paz o agrado

¿Tuvo una sensación de alegría? Increíble alegría

¿Sintió una sensación de armonía o unidad con el Universo? Me sentía unido o uno con el mundo

¿Le pareció de repente entenderlo todo? No

¿Volvieron a usted escenas de su pasado? No

¿Vinieron a usted escenas del futuro? No

¿Alcanzó un límite o una estructura física limitante? Si. No pude llegar al final del túnel porque tenía que regresar.

¿Llegó a una frontera o punto de no retorno? Llegué a una barrera que no se me permitió cruzar; o fui devuelto contra mi Decido regresar porque no estaba muy segura si la pequeña voz que decía:-“Bebé a bordo” se refería a mí. “Si lo hacía” razonaba, “entonces sería importante regresar, ya que ir al final del túnel significaría que el bebé (si es que había uno a bordo), moriría”.

Dios, espiritualidad y religión:

¿Qué importancia le daba a su vida religiosa / espiritual antes de su experiencia? Incierto Seguidora de las enseñanzas de amor universal de Sai Baba de la India (de origen védico).

¿Han cambiado sus prácticas religiosas desde su experiencia? No

¿Cuál es su religión ahora? Otras o distintas creencias como arriba.

¿Su experiencia incluyó características concordantes con sus creencias terrenales? Contenido que era totalmente concordante con las creencias que tenía en el momento de la experiência

¿Ha tenido un cambio en sus valores y creencias debido a su experiencia? Si. Creo que estaré aquí en la tierra hasta cuando sea necesario para el propósito que fuere y que será así a pesar del estado en que se encuentre mi cuerpo. Así que, desde la experiencia, no me he preocupado mucho por mi salud. Por ejemplo, se me urgió a que tomara medicamentos fuertes para controlar el ritmo cardíaco; me advirtieron que necesitaría un marcapasos, etc. Decidí ignorarlo y dejar que mi cuerpo sanara naturalmente durante los últimos seis años hasta que mi ritmo cardíaco volvió a ser casi normal. Me figuré que estaré aquí todo el tiempo que sea necesario a pesar de lo que parezca ser aquí. Por lo tanto, ¿por qué tomar drogas que te hacen sentir como un zombi e interfieren con el flujo de tu vida espiritual? Por ello, no las tomé y he asumido un riesgo calculado en mi calidad de vida. De todos modos no estoy a cargo de la fecha de salida, por eso digo: "No te preocupes al respecto. Sólo vive saludable y sé felíz".

¿Le pareció encontrar a un ser místico o una presencia, u oyó una voz no identificable? Me encontré con un ser definido, o una voz claramente de origen místico o sobrenatural

¿Vio usted espíritus fallecidos o religiosos? Los vi realmente

¿Se encontró o tomó consciencia de cualesquiera seres que vivieron previamente en la Tierra y que son descritos por su nombre en las religiones (como por ejemplo: Jesús, Muhammad. Buddha, etc.)? No

¿Obtuvo durante su experiencia información sobre la existencia pre mortal? No

¿Obtuvo durante su experiencia información sobre conexión universal o unidad? Si. Estabas inmersa en UNIDAD.

¿Obtuvo durante su experiencia información sobre la existencia de Dios? Si. La luz era una luz de AMOR supremo y que todo lo abarcaba; si esto es DIOS, entonces DIOS existe.

Con respecto a nuestras vidas terrenales aparte de la religión:

¿Obtuvo durante su experiencia conocimiento o información especial sobre su finalidad? Si. En la experiencia fuera del cuerpo anterior, me informaron que tendría dos hijos más, ambos varones. Me dieron esa información cuando estaba criando siete niños sola y tenía cero interés en otra relación o más niños, pero a pesar de mis fuertes reparos, esa información probó ser fidedigna y me permitió sentirme contenta de que mi último hijo nacería sano y salvo. Los doctores sentían que nuestras posibilidades bajo anestesia no eran brillantes.

¿Obtuvo durante su experiencia información sobre el sentido de la vida? No

¿Cree en la vida después de la muerte después de su experiencia? Incierto Si. Sin lugar a dudas hay una continuidad de la existencia. La consciencia de uno está intacta y la del propio ser completa sin conexión con el cuerpo.

¿Obtuvo información sobre cómo vivir nuestras vidas? Si. En la experiencia fuera del cuerpo anterior, me informaron que tendría dos hijos más, ambos varones. Me dieron esa información cuando estaba criando siete niños sola y tenía cero interés en otra relación o más niños, pero a pesar de mis fuertes reparos, esa información probó ser fidedigna y me permitió sentirme contenta de que mi último hijo nacería sano y salvo. Los doctores sentían que nuestras posibilidades bajo anestesia no eran brillantes.

¿Obtuvo durante su experiencia información sobre dificultades de la vida, desafíos y adversidades? No

¿Obtuvo durante su experiencia información sobre el amor? Si. TODO LO QUE HAY ES AMOR.

¿Qué cambios de vida ocurrieron en su vida después de la experiencia? Incierto Creo que me di cuenta que no importaba cuán grave o incluso mortalmente enfermo estuviera el cuerpo. Si tu tiempo aquí no terminó para poder pasar a la siguiente etapa del viaje, entonces regresarás “milagrosamente” y recibirás muchísima ayuda para hacerlo.

¿Han cambiado sus relaciones específicamente debido a su experiencia? No

Después de la ECM:

¿Fue la experiencia difícil de explicar en palabras? No

¿Con qué precisión recuerda la experiencia en comparación con otros acontecimientos de la vida que ocurrieron en la época de la experiencia? Recuerdo la experiencia con más precisión que otros acontecimientos de la vida que ocurrieron en la época de la experiencia

¿Ha tenido tras la experiencia dones psíquicos, no ordinarios u otros dones especiales que no tuviera antes de la experiencia? Incierto Ya estaba saliendo de mi cuerpo con regularidad. Había estado desarrollando ciertos poderes psíquicos. Me ha quedado una cierta sensación de que el drama no es importante, que lo importante es traer paz.

¿Hay una o más partes de la experiencia que son especialmente significativas o importantes para usted? Las partes más significativas fueron la EFC al planeta cuatro años antes y la voz potente (de Sai Baba) el día de la experiencia, y luego la serie de demoras que hicieron que la enfermera se chocara con el especialista en corazón en el corredor. Si todo esto no hubiera ocurrido, William y yo no hubiéramos sobrevivido, por ello sentí que en todo había mucha intervención divina.

¿Ha compartido usted alguna vez esta experiencia con otros? Si. Compartí toda la experiencia inmediatamente después con mi esposo. Se había acostumbrado a que tuviera experiencias psíquicas y espirituales y que sucedieran a mi alrededor, y sólo sintió gratitud que hubiéramos recibido tanta ayuda.

¿Tenía usted algún conocimiento de las experiencias cercanas a la muerte (ECM) antes de la experiencia? Si. De relatos escritos y de un relato de un amigo de toda la vida que había muerto durante veinte minutos debido a un ataque de asma y después había regresado a la vida. Su experiencia fue fascinante. Al dejar su cuerpo muerto, mirando cómo trataban de revivirlo, mentalmente les decía:“No se preocupen, estoy muerto”. Fue llevado a un pequeño planeta rocoso donde Sai Baba (a quien conocía sólo por una foto), habló largamente con él. Se le dio la oportunidad de hacer una revisión de su vida y luego pidió más tiempo, porque su partida hubiera significado dejar a su esposa y a sus cuatro hijos severamente afectados financieramente. Su “caso” fue escuchado, considerado, y luego se le dijo que tenía tres años más. Se despertó con una sábana sobre la cabeza y se sentó dando una enorme estremecedora bocanada de aire. El técnico presente en el cuarto sufrió un desvanecimiento, estaba muy asustado. Mi amigo trabajó en su granja como un Hombre poseído durante tres años hasta que terminó de pagarla. Luego, una tarde, le dijo a su esposa que no se sentía bien y le preguntó dónde estaba el libro de medicina. Ella le dijo que estaba en el dormitorio. Unos pocos segundos después, lo siguió y estaba en la cama. Había muerto de un ataque coronario masivo. Siempre he sentido que hubo mucha compasión en esa historia y que hubo una suerte de margen en la fecha de SALIDA que aparentemente podía negociarse.

¿Qué pensó sobre la realidad de su experiencia poco tiempo después (días o semanas) de que sucediera? La experiencia fue definitivamente real

¿Qué piensa ahora sobre la realidad de su experiencia? La experiencia fue definitivamente real

¿En cualquier momento de su vida, ha habido alguna vez algo que le haya reproducido parte de la experiencia? Si. Han habido muchos incidentes de “intervención” en mi vida. Escuché una voz muy clara diciéndome que hiciera algo, o un enérgico golpeteo en la espalda empujándome para que actuara en algo cuando estaba reacia a hacerlo. Siempre creo en estas indicaciones sin preguntas. Son siempre ciento por ciento oportunas e importantes para que ocurra un cambio nuevo y positivo, aunque no lo vea en el momento.

¿Hay algo más que le gustaría añadir acerca de su experiencia? Hay un mundo de belleza y amor y conexión que une a todos los seres en todas partes del universo – todos somos uno. Todo se trata de tus intenciones y elecciones. ¿Representas amor y compasión o egoísmo y pequeñez?

¿Hay alguna otra pregunta que podríamos hacer para ayudarle a comunicar su experiencia? Quizás menos repetición.