Descripción de la experiencia:

Era el 15 de Agosto de 1987 y estaba preparando mi escuela de baile para iniciar nuevas clases. Tenía fiebre de 38 a 39 grados (Célcius) y dado que la aspirina no funcionaba, llamé a mi doctor. Luego de oír mis síntomas, él diagnosticó una influenza. No nos preocupamos y lo encontramos hasta un tanto extraño, ya que no era la temporada de influenzas. Nos pusimos de acuerdo en comenzar con antibióticos, convencidos de que todo esto volvería a lo normal, bastante pronto. ¡Justo lo opuesto! Mis dolores se volvieron peores y mi temperatura subió hasta cuarenta grados.

Me negué a ir al hospital Yo vivía cerca de mi madre, y recibía asistencia médica en mi propia casa. Yo sólo recibía visitas de médicos y de mi madre que cuidaba de mí. Ya le había dicho a todo el mundo que podía ser contagiosa pero en realidad, yo no quería que nadie me viera así.

Día a día, me veía a mí misma declinar en mi físico y en mi moral. Mi cuerpo se debilitaba de una manera despiadada. Me dolían mis articulaciones. Me costaba levantarme de mi cama. No podía mantenerme de pie de manera estable y temía caerme y que mis piernas no me pudieran sostener. Dolía caminar. Perdí el apetito y me costaba tragar todas las deliciosas sopas de verduras que mi madre preparaba. La lectura me era incómoda y la luz me molestaba – Mi mente ya no controlaba mi cuerpo que se estaba rebelando.

Yo esperaba con ansiedad los resultados de los análisis médicos. Cuando estaba sola, yo sentía lástima por mí misma y lloraba, mientras estaba alerta de cualesquiera sonidos que viniesen desde la puerta, ya que mi madre a veces se dejaba caer en momentos inapropiados. Dejé de responder el teléfono debido a que el tono de llamada comenzó a molestarme en los oídos. Yo escuchaba los mensajes en la respondedora automática cuando me sentía lo suficientemente lúcida como para hacerlo. No lograba dormir de manera reparadora y todos los ruidos de la calle hacían eco y golpeaban dentro de mi cabeza.

Mi principal preocupación era intentar ocultarle a mi familia el empeoramiento de mi enfermedad, fuera por modestia o por temor a la hospitalización. Usé mi inteligencia para engañarlos pero ya estaba teniendo problemas para mantenerme alerta en todo instante.

Una mañana lancé toda la caja de tabletas para dormir por la taza de baño. Me había estado tomando media tableta cada noche las últimas dos semanas y pensé que ellas serían la causa de mis pesadillas y de mi delirio.

Despertaba en medio de la noche: sudando hasta el punto de quitarme el edredón o estando tan helada hasta el punto de no ser capaz de entrar en calor. Algunas noches, era perseguida por pesadillas de mis años de adolescencia. Caía persistentemente en un vacío, con mi corazón latiendo, hasta lo que parecía una eternidad. Despertaba horrorizada, jadeando y aferrándome a mi edredón igual que una loca.

Un día tuve que ir al hospital para hacerme unos exámenes y milagrosamente mi temperatura se mantuvo en treinta y nueve grados, lo que significó que fui dada de alta esa misma noche.

Una noche, pocos días más tarde, sentí que mi dolor pasaba y que mi fiebre se iba. Me sentía mejor, más en calma y para mi sorpresa, ya no oía sonidos de afuera. Sabía que iba a dormir profundamente y lo necesitaba desesperadamente.

En este silencio sanador, yo oí dos voces masculinas de un tono suave. Yo jamás las había escuchado con anterioridad y su claridad era desconcertante. Una estaba a mi izquierda y la otra a mi derecha y ambas estaban justo allí, sin ninguna manifestación física.

Estas voces placenteras y dulces eran reconfortantes para mis oídos. Yo escuchaba atentamente su conversación, pero de un momento a otro me sentí molesta. Me di cuenta que estaban calmadamente discutiendo mi destino, tal como si yo no estuviese allí. A pesar de mis mejores esfuerzos, fui incapaz de hacer ningún sonido con mi boca; estaba muda y sólo me podía dirigir a ellos de manera telepática. Sabía que podían oírme, pero a ellos no les preocupaba y actuaban como si yo no estuviera allí. Me sentí impotente y me estaban irritando al extremo. Entendía que algo anormal estaba ocurriendo, pero era de verdad y una seria decisión estaba siendo tomada a mis espaldas. Yo pensé en mi hija que todavía me necesitaba. Yo discutí, protesté, supliqué, mas nada funcionaba: ellos aún me ignoraban. La voz a mi izquierda estaba de mi lado y enumeraba todas mis cualidades, pero la de la derecha no estaba a mi favor: listaba mis más insignificantes imperfecciones. Al mismo tiempo, escenas que yo recordaba de mi vida y escenas en que yo aparecía pero que desconocía, se desenvolvían a tal velocidad que llegaban a rebotar dentro de mi cabeza. Todo esto era demasiado confuso y hallé la situación insultante y ridícula. Cansada de los inútiles esfuerzos que tuve que hacer para intentar ser oída y sacada de algunas de las imágenes y comentarios, me quedé dormida.

Pero de repente pude ver mi cuerpo debajo de mí, inerte, acostado sobre mi cama. Me sentía tan bien. Fui a ver a mi hija, quien dormía profundamente en el lugar de mi madre. Me movía libremente por el espacio con una desconcertante liviandad y velocidad. No había obstáculos ni barreras que impidieran mis movimientos aéreos. Atravesaba las paredes con placer infantil: La estaba pasando muy bien y absolutamente sacando provecho de esto. La Estatua de la Libertad y los rascacielos de Nueva York ya no me impresionan más.

Regresé a mi dormitorio para observar mi cuerpo con tanta indiferencia como antes. Me encontraba a mí misma desastrosa y desde adentro yo sonreí.

De pronto fui succionada violentamente por una fuerza incontrolable. Sentí como si mi corazón se me hubiera salido fuera y rápidamente me llevó hasta un lugar oscuro. Tenía pena y estaba terriblemente asustada: Era un tipo de abismo totalmente abierto e inestable, con muros que brillaban y era terriblemente oscuro. El desagradable olor a azufre me daba náuseas, Sombras espantosas aparecieron desde todas partes moviéndose incesantemente, sus quejidos eran espeluznantes. Ellas me tocaban suavemente, tratando de atraparme, de retenerme atrás – Yo estaba horrorizada y mi terror en su máximo. Entonces, una constelación brillante e intensa me cautivó, Yo irradié y fui atraída por ella. Ir hasta ella parecía eterno, pero mientras más cerca me sentía, más libre me hacía de mi letargo por su purificante brillo. Yo me sentía agotada.

Como por magia, yo entré en ella, o ella me absorbió – No podría hacer la diferencia. Fue entonces cuando todos mis miedos disminuyeron para dar lugar a la Paz, la serenidad y a un bienestar que no sabía que existiera.

Aquí yo estuve serena en un mundo en paz, donde la luz me iluminaba con toda su gloria e intensidad vigorizada, donde los perfumes exhalaban una cautivadora fragancia. Un mundo que se nutría de espectaculares sinfonías respaldadas por los melodiosos sonidos de coros sacros en donde en todo lugar existía belleza pura.

La naturaleza era rica, reluciente y lujuriosa. Los pastos verdes estaban llenos de flores con pétalos exquisitamente adornados, sombras sutiles y deliciosos perfumes, tan hermoso que nuestros más preciados jardines se habrían puesto verdes de envidia. Urbanizaciones de cristal adornadas con gemas preciosas brillaban en todas partes. Lagos azules que tenían reflejos plateados. Los bosques ofrecían una miríada de elegantes árboles; sus hojas eran suntuosas y eran de muchos tonos de verde fluorescente. Seres de una gloria excepcional expresaban el poder del Amor Eterno en toda su Verdad Pura. Jamás yo he visto algo tan extraordinariamente armonioso, Jamás yo había pasado a través de alguna experiencia sensorial tan integral e inteligente. Jamás me sentí tan libre de expresarme a mí misma tan libremente, jamás sentí una mayor innundación de amor.

Estoy cautivada y paralizada por la presencia de un grupo.

Un ser muy grande y de extrema belleza lo iluminaba todo. Él exudaba Superioridad Divina con su presencia. Él estaba descalzo y se alejó del grupo para enfrentarme con toda su magnificencia. Él vestía una larga, inmaculada alba blanca. Sus palmas colgaban a ambos lados de su cuerpo con sus palmas abiertas. Mi atención fue hacia sus largos y tendinosos dedos y sus finas y soberbias manos.

Él me observaba con una mirada de infinita bondad y de compasión que alcanzaba profundamente dentro de mi ser. JESÚS CRISTO se aparecía ante mí, envuelto en su Divina Presencia. Su radiación abrazaba mi alma. Podía sentirlo con cada fibra de mi cuerpo. El poder de su amor se envolvió en torno a mí dentro de un silencio surreal - ¡No quería irme de Él!

Un intempestivo ruido me forzó a abrir mis ojos. Sorprendida, me encontré en mi cama y me di cuenta que ella estaba en la puerta. No me moví. Ella pensó que yo estaba dormida y yo me puse triste. Unas pocas lágrimas suavemente rodaron hacia abajo por mis mejillas.

Podía oír a mi madre ajetreando en la cocina. Me levanté de un salto para correr a contarle que había muerto, pero que la muerte era un estado maravilloso. Es sólo la liberación de nuestros cuerpos que repleta nuestra alma de amor. Sorprendida de verme en pie, me preguntó por mi salud, antes incluso de que pudiese contarle sobre la increíble aventura que acababa de experimentar.

Nada me importaba más que contarle a ella la verdad que acababa de seme revelada. Había tal liviandad en mí que me hacía pensar que sin duda estaba mejor. Entonces me di cuenta: ¡He sido sanada! Mi mami escuchaba mi historia escépticamente y no me interrumpía para sugerirme que mi fiebre debía haber creado un delirio que hubiera producido un sueño encantado.

Esa tarde le pedí a mi mami que nos llevara a mi hija, a mi caniche Blondie y a mí a la montaña. Sentía esta extraña pulsión por estar con la naturaleza, de reconectarme con los árboles como si ellos fuesen vitales para mi completa remisión. Mi mami encontró inusual mi pedido pero con felicidad ella aceptó llevarnos a un feliz paseo. Mi hija y yo estuvimos en una alerta muy comunicativa. Nos abrazábamos una a otra y reíamos sin ninguna razón. Mi mami estaba preocupada de que no me cansara, pero se sentía feliz por nosotros. Blondie se sentía salvaje y corría en todas direcciónes sin alejarse demasiado. El aire se llenó con el eco de nuestra risa y la vida en la Tierra reganó sus derechos.

Tres días más tarde, al comenzar de este hermoso mes de October 1987, yo estaba nuevamente enseñando Gimnasia y dando lecciones de baile con tanto placer como antes mas con una energía renovada.

Todos los exámenes médicos salieron negativos. La enfermedad cuidadosamente mantuvo su secreto.

Información previa:

Sexo: Mujer

Fecha en que ocurrió la ECM: Octubre de 1987

¿En el momento de su experiencia, existía alguna circunstancia que amenazara su vida? No Enfermedad

Elementos de la ECM:

¿Cómo considera el contenido de su experiencia? Entremezclado

¿Se sintió separado de su cuerpo? Claramente abandoné mi cuerpo y existí fuera de él

¿Cómo compararía su máximo nivel de consciencia y alerta durante la experiencia con su consciencia y alerta normal de todos los días? Más Consciente y alerta de lo normal Toda la experiencia.

¿En qué momento de la experiencia estuvo en su máximo nivel de consciencia y alerta? Durante toda la experiencia.

¿Sus pensamientos estaban acelerados? Increíblemente

¿El tiempo pareció acelerarse o ralentizarse? Todo parecía estar sucediendo a la vez; o el tiempo se detuvo o perdió todo significado No tenía noción de tiempo ni espacio.

¿Sus sentidos eran más intensos que de costumbre? Increíblemente más intensos

Compare por favor su visión durante la experiencia con su visión cotidiana que tenía inmediatamente antes del momento de la experiencia. Si Yo podía ver a todas partes:

Adelante, atrás, arriba y abajo, izquierda y derecha, a lo lejos y cerca mío.

Mi visión era perfecta:

Los colores eran de un brillo deslumbrante.

La luz era pura.

Las formas podían tocarse una a otra.

Compare por favor su audición durante la experiencia con su audición cotidiana que tenía inmediatamente antes del momento de la experiencia. Si Podía escuchar extremadamente bien. Los sonidos eran perfectamente claros.

¿Le pareció ser Consciente de cosas que ocurrían en otro lugar, como si se tratase de percepción extra sensorial (ESP)? Sí, y los hechos han sido comprobados

¿Pasó hacia o a través de un túnel? Si Fui violentamente aspirada por una fuerza incontrolable. Sentí como si mi corazón se hubiera salido. Sufrí terriblemente, estaba tan dolida – Me encontré a mí misma en una suerte de abismo ampliamente abierto e inestable, con paredes brillosas de naranja y horripilantemente oscuro. El horrible olor a azufre me daba náuseas – sombras espantosas aparecieron de todas partes moviéndose en todas direcciones, sus quejidos eran horripilantes. Ellas trataban de agarrarme y de retenerme – Yo tenía tanto miedo.

¿Encontró o llegó a ser Consciente de algún ser difunto (o todavía vivo)? Si Yo estuve con seres de luz de extrema belleza, tal como era yo.

Había seres de excepcional magnificencia quienes expresaban el poder del amor.

Yo era amada y amaba naturalmente.

Me di cuenta que sólo Jesús y Su magnificencia era impresionante y deslumbrante.

Fluiamos libremente en el aire, pero también podíamos quedarnos quietos.

Él me comunicó lo siguiente:

El poder del Amor es el poder más grande.

El amor de uno a otro es esencial para el crecimiento espiritual.

Todo fue creado por el Amor y con Amor.

El suicidio no es una solución para escapar del sufrimiento.

La verdad está dentro de nosotros y no fuera.

Estamos llegando a 'ser'.

Lean 'Vida y Enseñanza de los Maestros del Lejano Oriente' de Baird T. Spalding que se me fuera ofrecido el 12 de Noviembre de 2005.

¿Vio, o se sintió envuelto por, una luz brillante? Una luz de claro origen místico o de otro mundo

¿Vio una luz sobrenatural? Si Primero vi una luz desde tan lejos y a pesar de ello, deseé tan profundamente encontrarme con ella, pero tenía tanto miedo de no ser capaz de hacerlo. Mientras más me acercaba, más me vigorizaba.

Era de una blancura deslumbrante, mas no cegaba. Estaba viva y era inteligente.

¿Le pareció entrar a algún otro mundo sobrenatural? Un reino claramente místico o sobrenatural

¿Qué emociones sintió durante la experiencia? Las emociones cotidianas: todas ellas.

¿Tuvo¿Tuvo una sensación de alegría? Increíble alegría

¿Sintió una sensación de armonía o unidad con el Universo? Me sentía unido o uno con el mundo

¿Le pareció de repente entenderlo todo? Todo sobre el Universo

¿Volvieron a usted escenas de su pasado? Mi pasado rápidamente pasó ante mí, fuera de mi control Vi mi concepción y aprendí que yo había elegido a mis padres aquí en la Tierra. Algunos eventos a los que yo no les había dado importancia y que ya había olvidado, fueron moralmente dolorosos de observar ya que inconscientemente yo había infligido palabras hirientes, elecciones no cuidadosas o acciones desconsideradas hacia personas de mi pasado. Aprendí a sopesar mis decisiones, a contener mi ira y a controlar mis palabras y mis pensamientos. Ahora yo practico meditación y relajación.

¿Vinieron a usted escenas del futuro? Escenas del futuro del mundo Fui testigo de escenas relacionadas con el futuro, debo admitir que además del déjà-vu y el conocimiento, yo no puedo demostrar nada – tal como si mi memoria hubiese sido desconectada de sus recuerdos.

¿Alcanzó un límite o una estructura física limitante? No

¿Llegó a una frontera o punto de no retorno? Llegué a una barrera que no se me permitió cruzar; o fui devuelto contra mi voluntad

Dios, espiritualidad y religión:

¿Qué importancia le daba a su vida religiosa / espiritual antes de su experiencia? Incierto Yo creo en Dios pero no lo entiendo. Yo comparo a Jesús con el Che Guevara.

¿Han cambiado sus prácticas religiosas desde su experiencia? No

¿Cuál es su religión ahora? Moderada 'Yo creo en El Único y la Unidad. Todas las religiones que yo respeto nos prometen una vida Eterna...'

¿Ha tenido un cambio en sus valores y creencias debido a su experiencia? No

¿Le pareció encontrar a un ser místico o una presencia, u oyó una voz no identificable? Me encontré con un ser definido, o una voz claramente de origen místico o sobrenatural

¿Vio usted espíritus fallecidos o religiosos? Los vi realmente

Con respecto a nuestras vidas terrenales aparte de la religión:

¿Obtuvo durante su experiencia conocimiento o información especial sobre su finalidad? Si Tuve acceso al Amor con 'A' mayúscula: Yo estaba disfrutando de sus buenas hazañas y de sus gracias sin moderación: la belleza, juventud, felicidad y salud.

Primero amémonos a nosotros. Luego, a los demás.

El Amor lo sana todo.

El orden del Universo es Amor y Luz. La Luz es inteligente y creativa.

¡Nosotros somos el Universo!

¿Han cambiado sus relaciones específicamente debido a su experiencia? Si Mis relaciones no son siempre buenas en el momento, pero van mejorando con el tiempo. Yo proyecto una confianza que puede confundir a las personas; hacerles creer que soy orgullosa, distante o indiferente, lo cual no soy en absoluto. Yo escucho más, Estoy más atenta, y más paciente, desde mi experiencia.

Después de la ECM:

¿Fue la experiencia difícil de expresar con palabras? Si En extremo difícil de describir. Yo escojo mis palabras con cuidado y construyo mis oraciones en la esperanza de describir con perfección mi experiencia. Yo traté de expresarla en su verdad y hacer a los demás sentir las emociones que elicitó en mí durante y después de ella.

¿Ha tenido tras la experiencia dones psíquicos, no ordinarios u otros dones especiales que no tuviera antes de la experiencia? Si Sino aquéllos que cada ser humano posee con ella/él misma/o: intuición, auto-sanación. Que hasta el día de hoy, eran desconocidas para mí. Desarrollé en mi interior, la capacidad de activar la fuerza interior natural de las personas. Soy capaz de sanar, de aliviar algunos estados fisiológicos, calmar el dolor y sanar algunas heridas. Traigo armonía y estabilidad favorable para el desarrollo del 'Ser'.

¿Hay una o más partes de la experiencia que son especialmente significativas o importantes para usted? Tres días más tarde, completamente sanada, yo fui capaz de dar lecciones de gimnasia y de danza con una extraordinaria energía desconocida para mí y que todavía dura hasta el día de hoy. Ya no siento más miedo de morir.

¿Ha compartido usted alguna vez esta experiencia con otros? Si Inmediata y espontáneamente se lo conté a mi círculo de amigas y familia. Estaban más bien confusas pero los cambios psicológicos y físicos que aparecieron en mí no las dejaron indiferentes y desde allí aparecieron preguntas y admiración.

¿Tenía usted algún conocimiento de las experiencias cercanas a la muerte (ECM) antes de la experiencia? No

¿Qué pensó sobre la realidad de su experiencia poco tiempo después (días o semanas) de que sucediera? La experiencia fue definitivamente real

¿Qué piensa ahora sobre la realidad de su experiencia? La experiencia fue definitivamente real

¿En cualquier momento de su vida, ha habido alguna vez algo que le haya reproducido parte de la experiencia? No

¿Hay algo más que le gustaría añadir acerca de su experiencia? Yo estoy todavía aprendiendo a amar.